El Instituto regional de Estadística permite consultar el 'Censo de Floridablanca' que recoge las ocupaciones en aquella época
MADRID, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
Consultar el 'Censo de Floridablanca', elaborado en 1787 bajo el reinado de Carlos III, ofrece la posibilidad de conocer al detalle a qué se dedicaban en aquella época los residentes de los distintos municipios de la Comunidad de Madrid, desde jornaleros, criados y dependientes de Inquisición hasta curas, abogados y empleados con sueldo real.
La finalidad del documento consistía en realizar una repartición de impuestos entre la población. En total, el censo desprende que, en 1787, vivían en Madrid 278.953 personas --al cierre de 2023 la región superó la barrera de los 7 millones de habitantes según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE)--.
De este modo, la Corona quiso conocer con mayor exactitud el número de personas que habitaban entonces el país, ya que consideraba que muchos pueblos "minoraban" la cifra de habitantes para no pagar más tributos o para evitar que los jóvenes fuesen llamados a filas en tiempos de guerra.
Para cumplir con los mandatos oficiales, Carlos III ordenó visitar todo pueblo y parroquia para formalizar una lista del "número de almas" que residía en todo el territorio, conforme a la edad de cada uno y su correspondiente oficio.
EL 32% DE LOS ESTUDIANTES VIVÍAN EN ALCALÁ DE HENARES
Durante los siglos XVI y XVII, la Universidad de Alcalá de Henares (UAH) --fundada por el Cardenal Cisneros en el año 1499-- se convirtió en el epicentro de la excelencia académica para el clero y los nuevos funcionarios "competentes" que se necesitaban por aquella época en los distintos reinos de España.
Según destaca la propia UAH, por las aulas de esta "sede de la aristocracia universitaria" pasaron Nebrija, Tomás de Villanueva, Ginés de Sepúlveda, Ignacio de Loyola, Domingo de Soto, Ambrosio de Morales, Arias Montano, Juan de Mariana, Francisco Valles de Covarrubias, Juan de la Cruz, Lope de Vega o Quevedo, entre otras personalidades.
Así, no es de extrañar que destaque el número de estudiantes en Alcalá de Henares, con un total de 476 (el 32% del total), una cifra solo superada por Madrid, municipio en el que estudiaban por aquel entonces un total de 727 personas (48,9% del total).
MADRID CONCENTRABA EL MAYOR NÚMERO DE CRIADOS
Precisamente, en la Villa de Madrid también se concentraba un mayor número de criados en relación a otros municipios de la Comunidad de Madrid. En concreto, el 'Censo de Floridablanca' indica que, en lo que hoy conocemos como la ciudad, vivían en torno a unas 147.500 personas --52.090 si no se tienen en cuenta los menores o personas sin profesión conocida--, de las que 17.313 (33,2%) se ocupaban del servicio doméstico a cambio de un salario.
Le sigue de lejos Alcalá de Henares, que en aquella época tenía un total de 556 residentes cuya profesión era servir en las casas de los más adinerados. En total, la región contaba con 23.523 criados.
Los hidalgos también se concentraban en mayor proporción en la Villa de Madrid, con más de 8.555 (16,4%), una cifra únicamente superada por los jornaleros, que ascendían a 8.928 (17,1%).
INQUISICIÓN, CRUZADAS Y DEMÁS OFICIOS DE LA IGLESIA
El 'Censo de Floridablanca' también recoge otras profesiones más desconocidas y que están relacionadas con la Iglesia. En 1787, el conde de Floridablanca, ministro de Carlos III, redactó una Instrucción en la que se recogía la obligación de proteger la religión católica, así como "favorecer" la Inquisición "mientras no se desviare de su instituto, que es perseguir la herejía, apostasía y superstición e iluminar caritativamente a los fieles sobre ellos".
Un ejemplo de ello son los dependientes de la Inquisición, que por aquellos años sumaban un total de 111 trabajadores en los municipios de la región, aunque la gran mayoría se concentraban en la Villa de Madrid.
En este sentido, también llama la atención el número de sacristanes (372), beneficiados (325), acólitos y curas (210), tenientes de cura (141), dependientes de Cruzada (56), y síndicos de órdenes religiosas (35).
COMERCIANTES, JORNALEROS, ARTESANOS Y EMPLEOS CON SUELDO REAL
Sin duda, hay una ocupación que destaca en esta radiografía de las profesiones de los madrileños en 1787, los jornaleros, con un total de 23.686 contabilizados en toda la región.
El modelo de producción de la agricultura en el s.XVIII en España era de carácter capitalista, con la presencia de una burguesía agraria arrendataria de tierras y una masa de jornaleros para trabajarlas.
Otras de las profesiones mayoritarias en la que se ocupaban los madrileños en aquella época son, entre otras, artesanos (9.379), hidalgos (9.100), labradores (8.554) y empleados con sueldo real (5.764).
En las instrucciones originales del censo no se hacía referencia a muchas profesiones como médicos, empleados de la administración local, trabajadores en hostelería y construcción, artistas, marineros, transportistas o ganaderos, por poner algunos ejemplos, por lo que no se sabe si están incluidas en el censo o si se han omitido.