MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los cerca de 80 refugiados que acampaban en un parque próximo a la Mezquita de la M-30 han sido reubicados por el dispositivo de acogida del MEYSS (Ministerio de Empleo y Seguridad Social) a través de convenio con la entidad ACCEM dentro del plan de acogida de refugiados en dos hoteles de Guadalajara pero diferentes asociaciones reclaman más medios.
Estos refugiados, entre los cuales se encuentran al menos 30 menores de edad, han acampado hace diez días en un parque aledaño a la mezquita de la M-30 y han dormido a la intemperie desde entonces, contando solo con la asistencia del Samur Social.
Por ahora, podrán estar durante tres días en estos hoteles, mientras se buscan "otras alternativas". Sin embargo, según ha asegurado a Europa Press el director de uno de los operativos de la Red Española de Inmigración, Rafael, al menos nueve personas han renunciado al refugio en estos hoteles "debido al miedo que tenían porque les pudieran detener".
"Estas instalaciones que han proporcionado desde el Ministerio no tiene las facilidades, ya que hay personas trece días sin ningún tipo de espacio básico, que no han podido lavar su ropa. Además, nos preocupa mucho que se haya dividido el grupo, están dividiendo familias", ha expresado Rafael.
Asimismo, este miembro de la Red Española de Inmigración ha llegado a la conclusión de el Ministerio ha enviado a los refugiados fuera de la capital de España, "para que no se vea el fracaso que está resultando esto". "Envían a personas fuera de la capital, cuando ya estaban empezando a insertarse. Es una vergüenza", ha espetado.
Por otro lado, Rafael ha manifestado que todo lo sucedido no es culpa de Accem, porque la asociación "tiene que estar a la orden de lo que le dice el Ministerio", quien, a su juicio, "está usando a entidades sociales como escudo y para echar la patata caliente".
El Ayuntamiento de Madrid ofreció este viernes a los refugiados la posibilidad de pernoctar en un albergue. El Consistorio se puso en contacto con el Ministerio, que es quien tiene la competencia.
A este respecto, este representante de la Red Española de Inmigración ha opinado que el Consistorio "puede cooperar", pero esta es "una competencia del Estado".
Por su parte, la presidenta de la asociación Al Awnar de Mujeres Marroquíes en España, Nadia Otomani, ha asegurado a Europa Press que el Hotel Azuqueca ubicado en Guadalajara "está colaborando en todo momento con las 41 personas instaladas", pero que el servicio de lavandería lo tienen externalizado y, por este motivo, "se debería comprar más champú y más jabón", para que los refugiados puedan lavar su ropa.
El presidente de la Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado, Daniel Méndez, ha pedido al Ministerio de Empleo y Seguridad Social y a su Secretaria General, Marina del Corral, "claridad sobre el futuro que se va a dar a estas 41 personas así como máxima cooperación a la Comunidad de Madrid y a la corporación para localizar a los más de 12 que abandonaron el grupo y no desearon participar del proceso ofrecido por el MEYSS".
"Esperamos que el plan del MEYSS no sea fraccionar el grupo y repartirlo por España como ya ha realizado en otras ocasiones y que los Refugiados de la M-30 puedan ser debidamente acogidos en Madrid como habíamos pedido a la Comunidad de Madrid, competente en materia de integración de personas migrantes", ha declarado Daniel Méndez en un comunicado.
Por último, la Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado ha agradecido la labor de las ONGs locales que dieron la voz de alarma, la Asociación Esperanza Al Amal, así como la entidad Solidaridad y Esperanza que actuaron conjuntamente para avisar a todas las organizaciones y que movilizaron al conjunto de la sociedad pública, algo que "evidenció que el sistema de acogida ha fallado, estrepitosamente".
Ayer, PP y Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid criticaban que el equipo de Gobierno municipal que dirige la alcaldesa, Manuela Carmena, "solo ponga pancartas" de apoyo a los refugiados cuando luego la recepción de los mismos la "gestionan otros", en alusión al grupo de 80 refugiados sirios que llevaban 10 días acampando en los aledaños de la mezquita de la M-30.