MADRID, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Junta Municipal de Vallecas ha solicitado cámaras para combatir los 'narcopisos' en el distrito, en la línea de las que se van a instalar en otra zona de Madrid, Tetúan, por los continuos conflictos que se vienen registrando, han confirmado fuentes municipales a Europa Press.
La solicitud ya ha sido realizada y el siguiente paso es la elaboración de un informe por parte de la Policía Municipal sobre la pertinencia o no de estas cámaras. Una vez se acepta, se remite el informe a la Delegación del Gobierno. Cuando dan el 'ok' comienza el proceso de compra de cámaras y su instalación.
Además, en este sentido, el concejal del distrito, Paco Pérez, ha solicitado que se establezca un juzgado especializado para agilizar las denuncias por los narcopisos", según ha adelantado 'El Mundo'.
Vallecas se quiere unir así a Tetuán, después de que la delegada del Gobierno, Concepción Dancausa, autorizase la instalación de 19 cámaras de videovigilancia en el distrito, siete de ellas en la calle Topete, tras recibir la petición formal del Ayuntamiento de Madrid el pasado 26 de octubre.
En concreto, siete cámaras se ubicarán en la calle Topete, tres en la calle Tenerife, dos en la calle Navarra, dos en la calle Castilla. Por su parte, las calles Santa Juliana, San Raimundo, Carolinas, Alvarado y Carnicer contarán con una cámara cada una. De las cámaras propuestas, 18 son tipo Domo motorizada y una será fija.
PROTESTAS EN VALLECAS
La petición de cámaras llega después de las reiteradas protestas de los vecinos del distrito con caceroladas en contra de la situación que se vive en el barrio, que aseguran está plagado de atracos, okupaciones y menudeo de droga.
Según informó una de las vecinas en declaraciones a Europa Press, estas protestas continuarán en horario nocturno "hasta que los jueces hagan caso y cierren todos los guetos" que asegura hay en la zona.
Estas protestas nacen a partir de ver cómo "rondaban" las casas de los vecinos para okuparlas, algo que "se ha puesto en conocimiento de Ayuntamiento y Policía", así como del tráfico de drogas que se da en la zona, muchas veces por parte de mujeres embarazadas.
Desde el Ayuntamiento ponen en valor que se han multiplicado los programas sociales en la zona, así como el aumento de la vida cultural "que funciona de manera preventiva" y un incremento de la presencia policial.
Aseguran asimismo que se trabaja "activamente" con el tejido asociativo, y hay "una plan de regeneración de la zona pactado con la FRAVM". Por otra parte, pide más colaboración interinstitucional.