Vecinos denuncian a la Comunidad por incumplir normas de contaminación en el proyecto de Portland en Morata

MADRID 23 Nov. (EUROPA PRESS) -

La asociación vecinal de Morata de Tajuña ha denunciado al Gobierno regional ante la Fiscalía General del Estado acusándole de violación de la normativa vigente en materia de prevención y control integrado de la contaminación, de residuos, de participación pública y de evaluación de impacto ambiental.

En concreto, la asociación cree que el Ejecutivo madrileño ha violado la normativa en el procedimiento de autorización del proyecto presentado por la empresa Portland Valderrivas S.A. para incinerar residuos en la fábrica de cemento El Alto que la empresa tiene en Morata de Tajuña.

Fuentes de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio han explicado a Europa Press que la Comunidad no ha tomado ninguna decisión sobre el proyecto y que están cumpliendo con los trámites legalmente establecidos.

De hecho, en estos momentos el procedimiento administrativo se encuentra en la fase de información pública, por lo que todos los interesados pueden presentar alegaciones. El plazo finaliza a principios de este mes de diciembre, han señalado las mismas fuentes.

De acuerdo al proyecto que la empresa presentó al Gobierno regional el 15 de noviembre de 2011, la fábrica El Alto sustituirá una parte sustancial de los combustibles tradicionales por residuos como caucho sintético, plásticos, lodos de tratamientos de aguas residuales urbanas, neumáticos, tejidos animales.

De hecho, Cementos Portland Valderrivas no emitirá más CO2 al cambiar parte de su mix energético a combustible de residuos en la cementera que tiene en Morata, según explicó en declaraciones a Europa Press el director de la fábrica de 'El Alto' en dicha localidad, Luis Ángel Herreras.

Precisó también que la compañía ha pedido la autorización para utilizar "combustibles alternativos no peligrosos" compuestos por residuos que, de otra manera, "se destinarían a vertederos".

Herreras ha explicado que no se trata ni mucho menos de que la cementera pase a ser una incineradora, sino que comprará un combustible que ya llega totalmente procesado a la fábrica y en cuyo desarrollo se utilizan diferentes materiales que ya se han determinado y han sido controlados para que no sean nocivos.

El uso de esos residuos, que son siempre transformados en combustibles alternativos por gestores autorizados, "no tendrá efecto negativo alguno ni para los trabajadores de la planta ni para los agricultores de la zona ni para los vecinos de los pueblos cercanos", ha garantizado.

Según la asociación de vecinos, que presentó la denuncia hace una semana, estos son "materiales cuya combustión multiplica de forma exponencial algunos contaminantes, de acuerdo a numerosos estudios internacionales que la denuncia referencia".

La asociación denuncia que, en el informe presentado a las autoridades madrileñas, Portland Valderrivas recoge "información que no es cierta", como que "las emisiones de los combustibles tradicionales son las mismas que las que produce la incineración de residuos".

Es decir, "no se tienen en cuenta las emisiones específicas de la incineración de los residuos, al tiempo que se ignoran las afecciones sobre el suelo, el agua, la vegetación, los cultivos y la fauna". Otra información que no es cierta se refiere a que "los residuos que se van a incinerar no pueden ser reciclados ni reutilizados", aseguran.

En relación a esto, la asociación cita estudios que reflejan que los diversos tipos de residuos incluidos en la solicitud pueden ser reciclados o reutilizados. Además, dicen que algunos de los contaminantes que el informe omite son, entre otros, butadieno, fenol, nitrosaminas, pireno, isocianatos, PBDE..., "sustancias que, como demuestran varios estudios, incrementan el riesgo de padecer cáncer y producen neurotoxicidad".

INFORMACIÓN SOBRE EL ESTADO CERO

La Asociación ha indicado que Portland Valderrivas tampoco advierte sobre el estado cero de la instalación, es decir, sobre la acumulación de metales pesados (vanadio, mercurio, cromo, arsénico, molibdeno, etc) en el suelo del entorno por la incineración de coque de petróleo y las consecuencias en la calidad de los cultivos, que en el caso del término municipal de Morata de Tajuña, corresponde fundamentalmente a olivos y viñas.

"Esta información sobre el estado cero tampoco se ha utilizado como referencia en el estudio de la modelización de la calidad del aire que ha aportado Portland Valderrivas, a pesar de su interés para conocer la distribución real en el territorio de las emisiones", han señalado los vecinos.

La asociación advierte, asimismo, de que el viento arrastrará las emisiones contaminantes hasta el casco urbano de Morata, situado a 2,8 kilómetros de la fábrica y recuerda que, según datos publicados en Inglaterra, la exposición al 1,3 --butadieno-- producida en la incineración del polietileno y de los neumáticos que se utilizarán en Morata- en un radio de 5 kilómetros de distancia duplica los casos de cáncer infantil.

Por todo ello, la asociación ha denunciado que el procedimiento de autorización ambiental presenta "irregularidades por ocultar información, contener falsedades e incumplir la normativa vigente" y solicita la paralización del proyecto "por resultar incompatible con la salud de las personas y el medio ambiente". Además, pide a la Fiscalía de Medio Ambiente que garantice el escrupuloso cumplimiento de la legislación medioambiental.