Patrimonio alega que la necrópolis "no se podía consolidar por las características del terreno"
MADRID, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
Vecinos de Vicálvaro, con la asociación Vicus Albus al frente, ha alertado sobre la desaparación de los restos de una necrópolis visigoda del siglo VI en el desarrollo de Los Ahijones que ha sido "destruida por las máquinas".
Tal y como ha trasladado a Europa Press el presidente de la asociación, Valentín González, el yacimiento arqueológico apareció "entre el límite de Vicálvaro y Vallecas" cuando se estaban desarrollando los planes urbanísticos de Los Berrocales y Los Ahijones.
"Fueron descubiertos hace unos seis o siete años; previamente la ley de Patrimonio obligaba a ver qué había en el subsuelo; vieron una cantidad de restos impresionantes, y ahora todo eso ha sido completamente tapado con tierra", ha lamentado González.
Antes de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) decretara la suspensión cautelar del plan director para la nueva estrategia de los desarrollos urbanísticos del sureste de la capital impulsada por el Ayuntamiento, los vecinos enviaron una carta a Patrimonio en la que pedían proteger estos restos.
En la misiva, a la que ha tenido acceso Europa Pres, pedían crear un "enclave o centro de interpretación" que recogiese "una muestra de todos los yacimientos descubiertos", tanto la necrópolis como del yacimiento de silex denominado Charco Hondo. "Si edifican encima habrán borrado otra hoja de nuestro pasado y nos avocarán a la impersonalidad de otro barrio dormitorio", apuntaban.
RESOLUCIÓN FAVORABLE A LEVANTAR LOS RESTOS
Por su parte, fuentes de la Consejería de Cultura y Deportes de la Comunidad de Madrid han informado a Europa Press de que el descubrimiento del yacimiento data del año 2011, y que "ya en su momento se hizo un informe arqueológico de la zona, se documentó todo el yacimiento y después se emitió una resolución favorable al levantamiento de los restos".
Se aseguró entonces que era "una zona de yeso" y que "la necrópolis no se podía consolidar por el material del terreno". Se emitió un informe arqueológico de la zona que dio como resultado una resolución de Patrimonio "por la que se permitían obras en la zona".
González, por su parte, asegura que "las tumbas estaban hechas con lascas, piezas enormes, que sustentaban las paredes". "No sé dónde habrán ido a parar", ha lamentado.
Patrimonio "exigió un control arqueológio y palentológico permanente". Sin embargo, tras la llegada de la crisis, no se llevó a término el desarrollo de estos terrenos. "El dueño de la parcela ha decidido, con permisos, llevar a cabo las obras", han indicado desde la Consejería encabezada por Jaime de los Santos.