Las víctimas de una brutal agresión neonazi en 'Sanse', "un ejemplo de lo que lleva aparejado el discurso del odio"

El abogado Erlantz Ibarrondo
El abogado Erlantz Ibarrondo - EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 19 octubre 2021 12:36

Un joven sufrió hasta 40 cortes en las manos al tratar de defenderse de los navajazos, mientras otro fue rajado de oreja a boca

MADRID, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -

Las víctimas de una brutal agresión neonazi cometida hace más de cinco años en San Sebastián de los Reyes por el único motivo de ser "antifascistas" han denunciado, a través del abogado que les representa en la causa, ser "un ejemplo práctico de lo que lleva aparejado el discurso del odio en las calles".

El juicio contra el supuesto 'skinhead' acusado de casi matar a dos jóvenes se retrasará durante varios meses debido a la incomparecencia de su letrada por enfermedad, un hecho que fue notificado ayer por escrito a la Audiencia Provincial de Madrid y que llevará a dilatar aún más el procedimiento beneficiando al encausado.

Los hechos se produjeron en marzo de 20016 cuando el acusado, junto a otros conocidos ya juzgados, iniciaron una persecución contra los jóvenes al grito de "rojos de mierda". Tras darles alcance comenzaron a agredirles con cuchillos, un destornillador y un cúter.

Las víctimas resultaron gravemente heridas. Una de ellas sufrió un corte de oreja a boca y otra sufrió más de 40 heridas en las manos al tratar de evitar que el conocido como 'El Fofy', el acusado, le apuñalara en el pecho.

La Audiencia Provincial de Madrid ya condenó a varios de los agresores en una pieza aparte mientras que se abrió una pieza separada respecto al ahora acusado por hechos delictivos cometidos de forma individual.

La Policía identificó al acusado a raíz de los controles selectivos realizados a Grupos Violentos de Carácter Radical, dentro del seguimiento que se lleva a cabo al movimiento skinhead neonazi.

La Fiscalía de Madrid solicita dieciséis años de prisión para L. A. G. por dos delitos de intento de homicidio con la agravante de discriminación ideológica, al igual que solicitan las víctimas del ataque.

El abogado de los agredidos, el letrado Erlantz Ibarrondo, ha señalado que hay un claro agravante por discriminación ideológica porque el motivo fundamental y único de la agresión es debido a que identificaron a estas personas como "de izquierdas, antirracistas y antifascistas".

"Desde 2016 y antes tenemos un ejemplo práctico de lo que los discursos del odio llevan aparejados en la calle", ha aseverado el letrado, quien ha aludido a las testificales de varios testigos que apuntan a que la persecución se inició después de que gritaron "rojos de mierda".

En instrucción, el acusado reconoció que participó en la pelea pero negó que portara armas, como sostiene el fiscal y los afectados. Sin embargo, las víctimas resultaron con heridas graves. A uno de ellos le rajó la cara y a otro le intentó apuñalar con una navaja en el pecho, de lo que da fe los múltiples cortes que tenía en la mano producidos cuando intentaba defenderse.

"La agresión fue de bastante entidad y se hablaría de otro tipo de resultado a no ser gracias a la solidaridad de las otra personas que se encontraban con ellos que les ayudaron", ha recalcado el abogado.

Ibarrondo ha subrayado que no es la primera vez que viene a juicio por una agresión de esta naturaleza, por lo que espera que se logre erradicar "la lacra del fascismo y el racismo".

PERSECUCIÓN CASI MORTAL

El fiscal afirma que el acusado "mantenía relación con personas vinculadas con la extrema derecha" y que incluso él mismo mostraba afinidad hacia ese tipo de colectivos.

Según el escrito de acusación, durante la madrugada del 5 de marzo de 2016, L. A. G. S., conocido como "Fofy", se encontraba con unos amigos en un bar de San Sebastián de los Reyes. Cuando transitaban G. H. A. y V. A. A. por la misma calle donde estaba ubicado el local, dos amigos del acusado que en estaban en la puerta del establecimiento empezaron a insultar a los viandantes con expresiones como "guarros", "rojos" o "hijos de puta" al identificarles por su "estética exterior" como personas de "extrema izquierda".

Los insultos provocaron un enfrentamiento entre las cuatro personas, e hizo que Fofy saliera del local junto a al resto de sus amigos. Los dos jóvenes insultados trataron de salir corriendo, lo que dio comienzo a una persecución de un grupo más amplio de agresores entre las que estaba el acusado profirieron gritos tales como "rojos de mierda", "venimos de Madrid a mataros" o "Hitler fans".

Tras darles alcance comenzaron a agredirles con instrumentos peligrosos que portaban como cuchillos, un destornillador y un cúter. Si bien fueron varias las personas que tomaron parte en la agresión, unos hechos por los que ya han sido juzgados los otros participantes, la Fiscalía acusa ahora a Fofy de haber realizado otros actos delictivos de forma particular.

En el caso de la paliza a V. A. A., el representante del Ministerio Público, reseña que, tras inmovilizarle poniéndose de rodillas encima, Fofy , "con evidente ánimo de acabar con su vida", intentó clavarle un cuchillo en el pecho mientras otras personas del grupo agresor le propinaban puñetazos y patadas en la cabeza.

Al ver la situación de peligro en la que se encontraba su amigo, G. H. A. propinó una patada al acusado "momento en que aquel se le encaró, y con idéntico propósito de acabar con su vida, le lanzó una cuchillada al cuello que le alcanzó en la cara, causándole un corte desde la comisura del labio hasta la región preauricular derecha (boca-oreja)".

La Policía identificó al acusado a raíz de los controles selectivos realizados a Grupos Violentos de Carácter Radical, dentro del seguimiento que se lleva a cabo sobre individuos pertenecientes a colectivos afines al movimiento skinhead neonazi con ocasión de reyertas, actos públicos y otros relacionados con grupos vinculados a la extrema derecha, "si bien no se puede afirmar su pertenencia a una organización en concreto".

En concepto de responsabilidad de civil la Fiscalía reclama 32.860,53 euros para las dos personas que resultaron heridas.