Espera aumentar un 50% la producción con la "misma plantilla"
BILBAO, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
El director de las plantas de Bridgestone en Basauri y Usansolo, Gorka Díez, ha afirmado que el coste de fabricación en la planta de Basauri se reducirá un 39% para el año 2018 y se aumentará un 50% la producción con la "misma plantilla". Además, en los próximos cinco años invertirá 47 millones en automatizar la producción.
Gorka Díez ha aportado estos datos durante su intervención en el tercer Congreso nacional de directivos de ADP que se celebra en Bilbao, en el que ha ofrecido la ponencia "Flexibilizar el mercado laboral y contener costes laborales"
En su intervención, ha apuntado que los costes laborales unitarios han experimentado en España un "descenso" teórico del 7% desde 2010, aunque en la industria han subido un 12%, porque las empresas de más de 200 empleados han aumentado sus costes salariales un 11%. Ha añadido que, desde 2000, se ha producido una pérdida de competitividad respecto al resto de países de Europa, aunque se puede estar "ganando algo" en los últimos tiempos.
Díez ha indicado que, en el sector industrial, el coste de empleado por hora trabajada en España se mueve en la franja de entre 20 y 30 euros por hora, por lo que se sitúa en la "mitad de la tabla", donde hay "bastantes países por debajo", e incluso algunos con costes laborales por debajo de los de China, lo que "empieza a ser alarmante" porque están "muy cerca" de donde se consumen los bienes industriales.
Respecto al sector de automoción, ha señalado que la situación es "preocupante" porque Alemania está "muy necesitado" de componentes de automoción y tiene "muy cerca" países europeos con "costes laborales muy baratos" y "nosotros somos más caros". Díez ha añadido que, aunque los datos macroeconómicos dicen que se están bajando los costes laborales, "en realidad, incluso están subiendo".
En el caso de Bridgestone, ha afirmado que han tenido convenios "muy rígidos", y, haya "crisis o no" aumentan sus costes laborales, por lo que es fundamental, a su juicio, introducir elementos de flexibilidad para poder "adaptarnos al cambio". Según ha apuntado, hay "poca visibilidad" en el mercado y no se sabe cómo será la evolución de la demanda.
En este sentido, ha enumerado las distintas herramientas de flexibilidad existentes y, tras recordar que Bridgestone es un grupo con 12.500 empleados en nueve fábricas, se ha referido a la situación en la planta vizcaína de Basauri, donde, al igual que en Polonia, se fabrican neumáticos para autobús y camión.
Según ha explicado, la fábrica vizcaína lleva abierta desde 1933, cuenta con 1.000 empleados, y fabrica un millón de neumáticos de autobús y camión.
Ha añadido que 2008 se produjo una caída de la carga de producción y aplicó un ERE de 127 días, "la única manera de apaciguar los costes laborales". Posteriormente, tras un "boom" en 2010 y 2012, volvió a caer la carga y se aplicó otro expediente de regulación. Ha añadido que se tuvo que ajustar la producción y se realizó un plan de reestructuración con 200 despidos.
Según ha apuntado, esta situación les puso en la disyuntiva de "ponerse a llorar" o empezar a pensar "no cómo sobrevivir sino como ser competitivos".
Díez ha señalado que Bridgestone en Basauri elaboró un plan que le va a permitir bajar el coste de fabricación actual un 39% para el ejercicio 2018 y se acometerá a través de la reducción de los costes laborales y de los energéticos. "Tendremos un mejor coste de fabricación que la fábrica gemela de Polonia", ha agregado. Además, pretenden lograr un 50% más de producción "con la misma plantilla".
Para ello, se ha implementado ya desde este año un nuevo calendario de trabajo, con cuatro relevos frente a los cinco que había anteriormente. Además, se van a invertir 47 millones de euros en los próximos cinco años para automotizar y mejorar la productividad de la fábrica y se trabaja en una mejora de la organización de los departamentos, con una organización "más ajustada".
Por otra parte, ha señalado que el convenio colectivo suscrito en septiembre del pasado año incorporan medidas de flexibilidad y se congelan los costes salariales, de manera que en 2018 sean "iguales" que los de 2013.
Díez, que ha apuntado que se han reducido los pluses un 17%, ha añadido que se ha aumentando en tres días la jornada anual. En caso de existir carga de trabajo, se pueden incrementar diez días adicionales al año por empleado. Según ha destacado, ello ha sido posible gracias a la "madurez de los sindicatos".
Por otra parte, ha señalado que la compañía se plantea reducir un 36% el coste energético, y ha adelantado que han elaborado un plan para ser el "numero uno" en cuanto a consumo energético.
A su juicio, todas estas medidas, a las que se unen otras adicionales como son "una flexibilidad programada y una flexibilidad sobrevenida" , les llevará a tener "un futuro ganador".