La posventa deberá adaptarse para compensar la menor mano de obra del coche eléctrico, según fabricantes

MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los principales responsables en España de las marcas Kia, Mercedes-Benz, Hyundai y Opel coinciden en que la especialización de los concesionarios deberá ser mayor para que las redes comerciales puedan afrontar nuevos retos como la electrificación o la digitalización, así como en que la posventa tendrá que ofrecer otros servicios a parte de la reparación y el mantenimiento de vehículos para equilibrar la menor mano de obra que requiere un coche eléctrico.

En el XXVIII Congreso & Expo de Faconauto, que se celebra este lunes y martes en Madrid, el director general de Kia Motors Iberia, Eduardo Divar, señaló que en la posventa la especialización de la red tiene que ser mayor y que, por tanto, la formación es un aspecto "fundamental".

Por su parte, el presidente de Mercedes-Benz España, Roland Schell, destacó en este contexto que un fabricante debe ayudar a su red con un "buen producto" y un desarrollo estratégico "racional" y "coherente".

"Nosotros trabajamos muy de la mano con el concesionario. Analizamos su negocio, vemos dónde puede mejorar, aspectos donde flaquea...", apuntó.

Además, dejó claro que el futuro de la automoción no es solamente eléctrico o híbrido, sino que será una "mezcla de tecnologías". "En España hace falta una verdadera discusión con los políticos y buscar la solución más justa", defendió.

Para el director general de Hyundai España, Leopoldo Satrústegui, los concesionarios ya son hoy en día "proveedores de servicios". El directivo precisó que todo el negocio de venta tiene que pasar por la red comercial, incluida la venta 'online'.

"La venta 'online' es algo que está ahí, pero que todavía es más una idea más que una realidad. En nuestro caso, cuando lo hagamos será a través de los concesionarios", aseguró, subrayando que la nueva movilidad, con el coche más pensado como un servicio que como una propiedad, "tardará en llegar".

De igual modo, el director general de Opel España, Jorge Tomé, consideró que la posventa es una palanca "fundamental" de la cuenta de resultados de un concesionario. "Dentro de un contexto caótico de la automoción, la posventa es lo único que está medio estable", subrayó.

PREVISIONES PARA 2019

Todos los directivos, a excepción de Satrústegui, prevén que las matriculaciones de turismos y todoterrenos se mantendrán estables respecto a 2018 (1,32 millones de unidades). El director general de la filial española de Hyundai estima que el mercado podría incrementarse hasta un 3%.

"Quiero ser optimista y esperamos un ligero crecimiento. Seguimos teniendo un parque móvil con una antigüedad media de 12,5 años y la gente sigue necesitando renovar su coche. Las nuevas tecnologías y los nuevos servicios como el renting a particulares también animarán a la gente a cambiar de coche", argumentó Satrústegui.

No obstante, Tomé focalizó el gran reto para el sector del automóvil en 2020, cuando las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de los turismos nuevos estarán limitadas a 95 gramos por kilómetro. En 2018, las emisiones medias de CO2 de los coches diésel se situaron en 115,1 gramos por kilómetro y en 123,3 gramos por kilómetro las de los de gasolina.

RENTABILIDAD DE LA RED

El director general de Kia Motors Iberia afirmó que la rentabilidad sobre facturación de la red comercial de la marca asiática se situará este año entre un 2,5% y un 3%, frente al 3,1% que logró en 2018, así como que la firma surcoreana no incrementará el número de concesiones de manera sustancial en el territorio nacional.

En la misma línea, Schell aseguró que este año la red comercial de Mercedes-Benz España conseguirá un rendimiento muy "sólido" y "fuerte", situada al "mismo nivel" de Kia. "Tenemos planes para el desarrollo de la posventa y también para el negocio de coche usado, que es muy importante para nosotros", indicó.

Por su parte, Satrústegui también espera que la red comercial de Hyundai obtenga una rentabilidad similar a las de Kia y Mercedes-Benz, mientras que Tomé aspira a que Opel supere en 2019 el 1%, frente al 0,5% actual.