MADRID 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
La transparencia en el mercado de coches de segunda mano de España ha experimentado un descenso a lo largo del último año, a pesar de que el mercado de coches usados se ha estabilizado y ha regresado a niveles prepandémicos en la mayoría de los países, según ha publicado la empresa de datos de vehículos Carvertical, que ha destacado que el 3,3% de los coches presentaban un kilometraje falsificado, con un ajuste medio de 83,874 kilómetros.
La compañía ha llevado a cabo su estudio anual sobre la transparencia del mercado de coches para evaluar cuáles son los países más riesgosos a la hora de comprar un vehículo de segunda mano. España ha perdido dos posiciones respecto al año anterior y ocupa ahora el 13º lugar de un total de 25 países.
La investigación realizada por Carvertical entre octubre de 2023 y septiembre de 2024 reveló que, en España, el 3,3 % de los coches de segunda mano presentaban un kilometraje falsificado, con un ajuste medio de 83,874 kilómetros.
Esta cifra podría duplicar fácilmente el kilometraje de un coche con pocos años de antigüedad. Dado que el precio de un vehículo depende directamente de su kilometraje, los conductores que adquieren estos coches terminan pagando significativamente más, según apunta Carvertical.
Las estadísticas relacionadas con los vehículos dañados también son alarmantes: más de un tercio (36,4 %) de todos los coches comprobados en la plataforma de la empresa en España habían estado involucrados en accidentes, con un valor medio de daños de 5.179 euros.
Los compradores de vehículos importados enfrentan el mayor riesgo de adquirir coches con kilometraje falsificado o daños en el pasado. Según el experto en automoción y responsable de comunicaciones en Carvertical, Matas Buzelis, los coches que se mueven en el comercio transfronterizo tienen hasta cuatro veces más probabilidades de haber sufrido manipulaciones en el cuentakilómetros.
Un notable 58,5% de todos los coches usados en España fueron importados de otros países, por lo que los compradores deben ser especialmente cautelosos al considerar vehículos importados.
La edad media de los vehículos adquiridos en España es de 8,5 años, lo que indica que los coches en este país tienden a ser más jóvenes en comparación con los de muchos otros países europeos, donde las flotas de coches envejecidos a menudo contribuyen a ocultar defectos y cuentakilómetros manipulados.
EL MERCADO DEL REINO UNIDO MANTIENE SU POSICIÓN DE LIDERAZGO
Al igual que en años anteriores, Reino Unido se consolidó como el mercado de vehículos de segunda mano más transparente entre todos los países participantes. Solo el 2,1 % de los coches presentaba un kilometraje falsificado, y el 17,8 % de los vehículos había sufrido daños.
A diferencia de Europa continental, el Reino Unido utiliza predominantemente coches con el volante a la derecha, que circulan en el país durante toda su vida útil, y solo un 2 % de los vehículos inspeccionados son importados. Los cinco países más transparentes también incluyen a Italia, Suiza, Alemania y Suecia.
"Los compradores de coches en Europa occidental y escandinava tienen menos probabilidades de encontrarse con fraudes de kilometraje o defectos ocultos. Las leyes más estrictas garantizan que los compradores puedan confiar más en la historia y la calidad del vehículo", ha declarado Buzelis.
Entre los países de Europa del Este, solo Eslovenia logró entrar en el top 10, ocupando la décima posición.
LA TRANSPARENCIA DEL MERCADO SE MANTIENE SIN CAMBIOS EN EUROPA DEL ESTE
Los países menos transparentes del estudio fueron Ucrania, Letonia, Lituania, Rumanía y Estonia, los cuales también ocuparon las posiciones más bajas el año pasado. Una alta proporción de coches con el kilometraje falsificado y daños, junto con una flota de vehículos envejecida y tasas de importación significativas, contribuyen a que estos mercados sean considerados altamente riesgosos y no transparentes.
El mayor número de casos de fraude de kilometraje entre los países europeos se registró en Letonia (11,1%) y Ucrania (9,6%). Por otro lado, la mayor proporción de coches dañados se encontró en Polonia (62,1%) y Eslovaquia (60,5 %).