Apenas unos 100 eléctricos sobre un total de unos 700.000 vehículos que se dan de baja cada año
MADRID, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
El 95% del componente del automóvil se logra reutilizar o se reciclar, según una de las conclusiones obtenidas durante el 'webinar' organizado por la empresa especialista en portales verticales de motor, con la colaboración de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac).
La compañía explica en un comunicado que en España se dan de baja los vehículos una vez transcurridos, en promedio, unos 19 años, y una vez concluido ese tiempo, se reutilizan entre 1.330 y 1.520 kilogramos del total de su peso.
Así, la segunda vida de un vehículo empieza cuando sus piezas antiguas vuelven a tener una utilidad y esto se puede producir por medio de tres vías: reutilizarse para que las incorporen otros vehículos; reciclarse para fabricar otros componentes y piezas; y, en el caso de que no se puedan hacer ninguna de esas dos cosas, se transforman como posible fuente de energía.
Este proceso de segunda vida comienza en los Centros Autorizados de Tratamiento de Vehículos (CAT), que arranca con el proceso de descontaminación del vehículo (batería, líquidos contaminantes como el aceite, el líquido de frenos, el líquido refrigerante) y, a continuación, el proceso de desmontaje de cada una de las piezas, de acuerdo a la información oficial de cada fabricante que viene recogida en la plataforma europea y regulada, 'Aidis'.
Sumauto explica que hay otros actores dentro de este sistema de economía circular, como el fabricante, que tiene una serie de obligaciones hacia el consumidor final. Entre las más importantes, destaca la de informar sobre su compromiso del correcto tratamiento medioambiental de cada una de las piezas en su proceso de reutilización o reciclaje, además de la posible revalorización de los diferentes residuos y componentes.
El fabricante también es responsable de informar al usuario sobre los sitios autorizados a los que puede llevar su vehículo cuando decida darlo de baja. Aquí, ya entran en juego los centros CAT y los talleres, quienes a su vez también tienen una serie de obligaciones y responsabilidades con el consumidor, en un proceso que se conoce como doble garantía previa, donde el CAT certifica la calidad de una pieza reutilizada que vende a un taller y este, a su vez, certifica su calidad y garantía al usuario final.
Por todo ello, cuando un consumidor acude a un taller para reparar un vehículo, hay una obligación legal que indica que la pieza elegida para ello es reciclada, reparada o nueva, detalla la empresa.
VEHÍCULOS ELÉCTRICOS Y LA ECONOMÍA CIRCULAR
Por último, Sumauto señala que la presencia de cada vez más vehículos eléctricos plantea un nuevo escenario, ya que son muy pocos los que llegan a los CAT. En este sentido, Sumauto indica que apenas son unos 100 vehículos eléctricos sobre un total de unos 700.000 automóviles los que se dan de baja cada año.
Respecto a los diferentes retos, la reparación de las baterías es uno de los temas de los que más se ha estado hablando en los últimos tiempos, aunque poco a poco van surgiendo más empresas especializadas tanto en su reparación como en su reciclaje, indica la empresa.
"En definitiva, la economía circular va a ser otro de los factores de competitividad que diferenciará a unos fabricantes de otros en un escenario donde cada vez va a haber más colaboración y cooperación entre todos los actores participantes", concluye Sumauto.