La planta cántabra es la única del grupo no afectada por un nuevo ERTE hasta el 30 de septiembre
SANTANDER, 21 May. (EUROPA PRESS) -
La planta de Bridgestone en Puente San Miguel ha finalizado este jueves el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que ha tenido vigente durante dos meses, y este viernes recupera a toda la plantilla, compuesta por más de 400 trabajadores, "con la producción prácticamente al 90% de lo que tenía asignado a principios de año", según ha informado a Europa Press el presidente del comité, Luis Ruiz Eguren.
La fábrica cántabra es la única de las cuatro que la multinacional tiene en España que se ha quedado fuera del nuevo ERTE planteado para el periodo comprendido entre el 22 de mayo y el 30 de septiembre, que afecta a 2.335 trabajadores de las fábricas de Basauri (excepto Bladders), Usansolo y Burgos.
La comisión negociadora alcanzó la semana pasada un acuerdo respaldado por UGT, CC.OO., BUB y ELA (12 de 13 miembros), que mantiene las condiciones del ERTE anterior e incorpora nuevas demandas sindicales.
Respecto a los trabajadores de Puente San Miguel, no afectados por este nuevo ERTE, se ha acordado que en caso de necesitar afrontar un escenario diferente, estarían amparados por las condiciones de este acuerdo hasta el 30 de septiembre.
El presidente del comité de empresa de Bridgestone en Puente San Miguel ha explicado que las cuatro plantas del grupo entraron en ERTE el 21 de marzo, pero desde entonces, "las circunstancias que se han ido dando han sido dispares".
Así, mientras las otras plantas han trabajado a menor ritmo, la de Puente San Miguel "ha ido subiendo hasta el 60% de la plantilla y de la producción que tenía anteriormente", y "la perspectiva para lo que queda de mayo y todo junio es que la fábrica se va a poner prácticamente al cien por cien".
Ruiz ha explicado que para Puente San Miguel no se pide un ERTE, principalmente porque el mercado de reposición de ruedas de tractor no se ha visto tan afectado como en el caso de las fábricas de tractores, que han estado paradas.
Además, hace unos días se puso en marcha la línea de camión, que tiene poca producción y las dimensiones que se hacen en Cantabria no se hacen en la fábrica de Bilbao, por lo que había algunos pedidos que atender.