Todavía es un prototipo, pero promete conseguir una reducción de hasta el 90% de las emisiones contaminantes
LILLE (FRANCIA), 30 (EUROPA PRESS)
Renault Emblème, el prototipo 'shooting brake' del negocio cero emisiones de la marca del rombo, Ampere, será un coche eléctrico de hidrógeno con más de 1.000 kilómetros de autonomía que promete conseguir una reducción de hasta el 90% de las emisiones contaminantes con respecto de un vehículo de combustión semejante.
Así, según un estudio interno de Renault compartido con Europa Press, el Renault Emblème obtiene una reducción del 70% de la huella de carbono en todos los componentes, un 50% de materiales reciclados y casi todos los materiales utilizados reciclables al final de su vida.
Con una estética próxima a la de un SUV, éste será un coche 'grande' de 4,8 metros de largo --8 centímetros más que el Renault Espace-- con una distancia entre ejes de 2,9 metros y un peso de apenas 1.800 kilogramos.
El aspecto exterior contará, según el 'concept car' vislumbrado en el Salón del Automóvil de París de este pasado mes de octubre, con llantas cerradas, una firma lumínica completamente renovada respecto de los vehículos del grupo a la venta en estos momentos que incluye el nombre de la marca retroiluminado en la sección trasera.
Con todo ello, la firma espera alcanzar su objetivo el 'cero neto' en Europa en 2040, mientras que el resto del globo espera poder conseguirlo en el 2050, una década después.
Para el consejero delegado del grupo Renault y Ampere, Luca de Meo, este vehículo es la "prueba" de que el automóvil "sigue siendo un motor de progreso".
"De media, un coche térmico deja una huella de 50 toneladas, mientras que en Emblème son 5 toneladas, de la cuna a la tumba. Es una obra maestra", ha sentenciado.
MECÁNICA 'CERO EMISIONES'
Bajo el capo, el Emblème integra un tren mecánico que contará con dos métodos de alimentación: una batería recargable --como la de cualquier coche eléctrico para desplazamientos diarios-- y una pila de combustible de hidrógeno para trayectos más largos.
El sistema eléctrico integra, de esta manera, un motor de 215 caballos de potencia alimentado por una batería de 40 kilovatios hora de capacidad. Por otro lado, a esto hay que sumar un depósito de 2,8 kilogramos para almacenar el hidrógeno.
LA CADENA DE VALOR SE MODIFICA
Además, con el Emblème, Ampere va a modificar toda la cadena de valor para conseguir suministro "sostenible" de níquel gracias a su asociación con Terrafame. A través de este acuerdo, Renault se asegura el suministro de sulfato de níquel, que representa una capacidad anual de aproximadamente 15 gigavatios hora.
Al tiempo, pretende obtener litio, gracias al pacto a cinco años vista con Vulcan Energy como parte del "Zero Carbon Lithium Project" para asegurar entre 6.000 y 17.000 toneladas anuales de litio para baterías eléctricas. De esta manera, el 80% de los materiales estratégicos reciclados se integrarán en la producción de nuevas baterías en 2030.
En definitiva, el grupo Renault se ha fijado como objetivos alcanzar un 33% de materiales reciclados en la masa de sus vehículos de aquí a 2030 y una reducción del 30% de las emisiones de dióxido de carbono vinculadas a los suministros por vehículo de aquí a 2030. En la producción, el objetivo para materiales reciclados es un 55% de acero, un 60% de vidrio y un 82% de aluminio plano antes de 2035.