MADRID 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
El grupo automovilístico Stellantis y el grupo francés de energía nuclear Orano han anunciado la cancelación del proyecto para crear una empresa conjunta centrada en el reciclaje de baterías de vehículos eléctricos.
Sin explicar los motivos detrás de su ruptura, ambas empresa se han limitado a puntualizar que el memorando de entendimiento firmado en octubre de 2023 no era vinculante y que, en este momento, no ven viable el proyecto.
En su momento, las compañías advirtieron que el objetivo de la 'joint venture' era fabricar cátodos --parte de la batería que genera el flujo de electricidad y alimenta los sistemas del coche-- a partir de materiales reciclados.
En un comunicado, Orano asegura que sendas empresas están "explorando otras relaciones comerciales considerando la calidad del proceso de reciclaje de Orano".
PRESIÓN POR ACELERAR EL RECICLAJE
En este contexto, Stellantis --a través de Automotive Cells Company de la que es socia junto a Mercedes-Benz y Total Energies-- ya colabora con la belga Umicore para reciclar los residuos de producción de celdas en la planta de Nersac (Francia).
El conjunto del sector también trabaja para reducir los residuos de la electrificación de la flota. Renault, por ejemplo, busca ser el primer fabricante europeo en reciclar las batería de forma masiva creando un sistema de economía circular que le ayude a reducir la dependencia de China y genere ingresos para el grupo.
Por el momento, el grupo que dirige Luca de Meo admitió en abril estar en en conversaciones con "compañías especializadas" que ya se encuentran en una etapa "avanzada" de reciclaje que puede ayudar a Renault. Sin embargo, por el momento no ha trascendido ninguna alianza en esta dirección.