Tavares asegura que si los fabricantes chinos consiguen una cuota del 10% en Europa, implicaría un volumen de 1,5 millones de unidades
MADRID, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
El consejero delegado Stellantis, Carlos Tavares, ha indicado en una entrevista publicada este lunes que el grupo automovilístico internacional no descarta el cierre de plantas ante el crecimiento de la competencia china en Europa.
"No se puede descartar nada", ha dicho el directivo al diario financiero francés 'Les Échos' antes del París Motor Show. Si los fabricantes chinos consiguieran una cuota de mercado del 10% en Europa al final de su actual campaña, esto implicaría un volumen de 1,5 millones de automóviles, ha cuantificado.
"Eso corresponde a siete plantas de montaje. Los fabricantes europeos tendrían que cerrarlas o entregárselas a los chinos", ha advertido Tavares.
Asimismo, el directivo ha denunciado que los aranceles no tendrán un efecto relevante en los fabricantes de automóviles chinos, ya que estos lograrían eludir los aranceles punitivos previstos por la Unión Europea invirtiendo en plantas en Europa.
"Una vez que eso ocurra, no debería sorprendernos que haya que cerrar plantas de producción para reducir el exceso de capacidad exacerbada", ha denunciado Tavares.
Stellantis, que fabrica marcas como Peugeot, Citroën, Opel, Fiat, Chrysler y Jeep, emitió 'profit warning' el mes pasado, atribuyendo la reducción de sus previsiones de beneficios a los problemas de desaceleración de sus ventas que enfrenta en el mercado de América del Norte y a las difíciles condiciones generales del sector, con una caída de la demanda de los vehículo eléctricos.
El grupo de automoción internacional recortó el pasado 30 de septiembre sus previsiones de resultados para el ejercicio de 2024 y espera un margen de ingresos operativos ajustados (AOI) de entre el 5,5% y el 7%, por debajo del porcentaje de "doble dígito" anterior.
Además, pretende una reducción de envíos en Norteamérica de más de 200.000 vehículos en el segundo semestre de 2024 (el doble de la reducción que tenía previamente planificada), en comparación con el mismo periodo del año anterior, así como aumentar gastos en incentivos en vehículos del año modelo 2024 y anteriores, y mejoras en la productividad que abarcan ajustes de costes y capacidad.
Por otro lado, el pasado viernes, Stellantis confirmó que ya había arrancado el "proceso formal" para designar al sucesor del actual consejero delegado, Carlos Tavares, cuando éste abandone su cargo a principios de 2026.
Movimiento que llegó de manera complementaria con una reestructuración profunda de los órganos directivos de la compañía ante la crisis de negocio que vive.
"Después del reciente frenesí mediático en torno a mi sucesión, el apoyo unánime de la junta directiva y del presidente John Elkann permite a todos volver a centrarse y trabajar con calma hasta el final de mi contrato", ha afirmado Carlos Tavares durante la entrevista.