Volvo Cars es la única empresa en Europa que cumple ya su objetivo de emisiones para 2025
MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
Volkswagen y Ford son los dos fabricantes que más abajo se encuentran en el ranking de compañías que no han cumplido con los objetivos de emisiones de dióxido de carbono (CO2) fijados por la Unión Europea (UE) para los coches nuevos en 2025.
En concreto tienen una brecha de 22 y 24 gramos CO2/km respectivamente, y necesitarán redoblar sus esfuerzos para cumplir con dicho objetivos, según encuentra un estudio de la Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente (T&E) publicado este miércoles.
La organización explica que la regulación de la emisión del CO2 de los automóviles es la medida más importante para reducir las emisiones de los automóviles nuevos en Europa. Por tanto, es gracias a este reglamento que las emisiones de CO2 de los coches nuevos en la UE se han reducido un 28% desde 2019.
En 2025 entrará en vigor la siguiente etapa de este reglamento con una reducción del 15% respecto a la base de emisiones de 2021. En este sentido, T&E estima la brecha de cumplimiento de los fabricantes de automóviles con este objetivo de 2025 en función de sus emisiones en 2023.
El análisis muestra que Volvo Cars ya cumpliría su objetivo de 2025 en función de sus ventas de 2023, mientras que fabricantes de automóviles como Kia o Stellantis tienen una brecha de menos de 5 gCO2/km y, por lo tanto, parecen estar bien encaminados hacia sus objetivos para 2025.
T&E señala que, la lección clave del objetivo 2020/21, es que, a pesar de que los fabricantes de automóviles estuvieron por debajo del objetivo en 2018-2019, todos cumplieron el objetivo (o solo lo incumplieron por un pequeño margen).
Lo que demuestra que es difícil predecir la capacidad de un fabricante de automóviles para cumplir un objetivo futuro teniendo en cuenta los avances realizados en los dos años anteriores. Sin embargo, T&E afirma que lo que está claro es que los fabricantes de automóviles conocen el objetivo para 2025 desde 2017 y todos han preparado y ajustado sus estrategias para cumplirlo en 2025.
Asimismo, señala que existen múltiples estrategias y flexibilidades que los fabricantes de automóviles pueden y están aprovechando para cumplir los objetivos, que van desde mayores ventas de vehículos eléctrico de batería (BEV), la mejor estrategia a largo plazo, hasta una mayor eficiencia de los modelos de combustión y la agrupación de emisiones entre varios fabricantes.
Por otro lado, la organización apunta a que los fabricantes de automóviles también pueden hacer mucho para ajustar sus ventas modificando los precios y los incentivos de los concesionarios, o planificando nuevos modelos y disponibilidad de variantes para cuando necesiten vender más vehículos eléctricos.
Sin embargo, T&E subraya que muchos fabricantes de automóviles están dando prioridad a vehículos "más grandes y caros". Estos vehículos más pesados son más contaminantes, pero ofrecen mayores márgenes de beneficio.
Como resultado, la falta de modelos de vehículos eléctricos asequibles está frenando las ventas de vehículos eléctricos, lo que explica algunas de las importantes brechas actuales con respecto a los objetivos de 2025.
T&E reclama que "después de años de ganancias, ya es hora de que los fabricantes lancen modelos de vehículos eléctricos asequibles para el mercado masivo y ajusten sus precios para incentivar sus vehículos más limpios".
LOS FABRICANTES NECESITAN VENDER UN 24% DE BEV EN 2025 PARA CUMPLIR
Otro hecho que resalta la organización es que, si los fabricantes de automóviles no mejoran sus ventas de vehículos de motor de combustión interna (ICE) en comparación con 2023, necesitarían vender un 24% de vehículos eléctricos de batería (BEV) en 2025.
Además de introducir nuevos modelos BEV, los fabricantes de automóviles también pueden vender más híbridos o reducir el tamaño de los modelos más contaminantes.
En este caso, la participación promedio de ventas de BEV podría reducirse al 18% para cumplir con los objetivos de 2025. Los fabricantes de automóviles también pueden optar por "agrupar" sus ventas, como lo hicieron Honda, Jaguar Land Rover y Tesla en 2022, indica.
Volvo Cars y Tesla también podrían ser candidatos para agruparse en 2025. Si los fabricantes de automóviles como Volkswagen, Ford y Mercedes-Benz agruparan sus ventas con los líderes de la tabla (Tesla y Volvo Cars), la cantidad de BEV que esos tres fabricantes de automóviles tendrían que vender disminuiría en un 36%, explica.
Por tanto, T&E señala que si se pone esto en perspectiva, el objetivo para 2025 "es fácil", ya que se limitó a un -15%, propuesto en 2017 y no se modificó en la revisión de 2023 como un compromiso en el camino hacia una ambición más alta para 2030 bajo el Pacto Verde de la UE.
Además, destaca que dada la carrera global por dominar el mercado de vehículos eléctricos, "relajar la única política que impulsa a los fabricantes de automóviles europeos a invertir en electrificación iría en contra de los intereses industriales y de soberanía europeos".
"Si la UE decide debilitar su regulación o renunciar a las multas, corre el riesgo de desacreditar la agenda y las normas climáticas de la Unión y dejar a los fabricantes de automóviles europeos a merced de las ambiciones de los fabricantes de automóviles globales", añade la organización.
También, concluye que "en lugar de cuestionar las normas", los fabricantes de automóviles europeos deberían "hacer lo correcto para el clima y la economía de la UE e intensificar sus esfuerzos para cumplirlas y demostrar que están plenamente comprometidos con la transición a la electricidad".