MADRID, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -
El fabricante de automóviles Volvo Cars contabilizó un beneficio neto de 4.000 millones de coronas (351 millones de euros) en los tres primeros meses del año actual, lo que representa una disminución del 12% si se compara con los resultados del mismo período del año anterior.
Según informó este jueves la empresa, la cifra de negocio de la firma en los tres primeros meses del ejercicio actual se situó en 95.700 millones de coronas (8.408 millones de euros), un 29% de crecimiento en la comparativa con los ingresos contabilizados un año antes.
Además, la compañía sueca registró un beneficio operativo trimestral de 5.100 millones de coronas (448 millones de euros), un 16% menos, mientras que su beneficio bruto de explotación (Ebitda) se contrajo un 8%, hasta 9.200 millones de coronas (808 millones de euros).
Las matriculaciones mundiales de Volvo Cars se situaron en 162.900 unidades en el primer cuarto del ejercicio actual, lo que se traduce en un aumento del 10% respecto a las 148.300 unidades que entregó en el primer trimestre de 2022. En este sentido, vendieron 30.100 vehículos completamente eléctricos, un 157% más que los 11.700 del año anterior.
"Hemos sentado unas bases sólidas para el resto de 2023, pero nos mantenemos alerta por las continuas turbulencias en todo el mundo", ha asegurado el director ejecutivo de Volvo Cars, Jim Rowan
De cara 2023, la empresa muestra un optimismo "cauteloso" debido a que la escasez de componentes afectarán a la producción durante el segundo trimestre. Aún así, Volvo Cars espera un crecimiento de dos dígitos en ventas al por menor y de la misma cifra en coches eléctricos, siempre que no se produzcan interrupciones inesperadas en la cadena de suministro.