El representante español en Eurovisión 2021, Blas Cantó, en Róterdam (Países Bajos) - RAUL TEJEDOR/RTVE
MURCIA, (EUROPA PRESS)
El representante español en Eurovisión 2021, Blas Cantó, se encuentra inmerso en los ensayos y preparativos de última hora antes de su participación en el festival, el próximo sábado, 22 de mayo, que se celebra en el Rotterdam Ahoy (Róterbam, Países Bajos) y que supone "un sueño cumplido" para el artista español, cuyo objetivo es que, cuando lo vean desde España se sientan orgullosos de su actuación, que piensen "este es nuestro chico".
El mismo que en 2004 se presentó a la elección de representante de EuroJunior, que ganó María Isabel con su 'Antes muerta que sencilla', que finalmente ganó esa edición del festival.
Y el mismo que el año pasado no pudo participar en Eurovisión 2020 con su canción 'Universo' porque se suspendió por la situación de pandemia mundial producida por el Covid-19. Aún así, no ha perdido la ilusión y se sube al escenario sintiéndose "muy afortunado".
Ha reconocido tener un año muy duro en lo personal, con el fallecimiento de su abuela y de su padre, y en lo profesional, con la situación de pandemia y la suspensión del festival en 2020.
Por ello este año la participación en esta edición y el tema con el que se presenta --dedicado a su abuela-- lo hacen "muy especial", junto con una escenografía espectacular que crea una atmósfera muy íntima y con la que Blas Cantó espera que en España guste y se sientan orgullosos, que cuando lo vean en el escenario piensen "este es nuestro chico" y está cumpliendo "su sueño".
En una conversación con Europa Press, Blas Cantó, ha reconocido sentirse "muy bien, intentando disfrutar de las olimpiadas de la música", para las que se ha estado preparando dos años y "muy afortunado de poder ser parte de este festival", algo que siempre ha sido "un sueño" para el cantante.
"Nada es lo que te esperas, es impresionante y lleno de sorpresas", ha contado el artista murciano, quien ha asegurado que, a pesar de todo, se ha preparado "ante posibles complicaciones" que supondrían que alguien del equipo pudiera dar positivo en Covid-19.
Para evitar esas complicaciones, esta edición es algo diferente, están aislados en el hotel, se han creado como microburbujas, muy controladas y pendientes de que nadie del equipo pueda dar positivo. No pueden hacer turismo, ni siquiera ir a comprar, pero es algo que asume muy consciente de que cualquier descuido puede suponer poner en peligro la actuación.
Aún así, "echa de menos más contacto con los demás participantes", pero lo suple con el apoyo permanente de su equipo, sus coristas, su mánager, que son como su familia, ya que, por la situación actual, no han podido acompañarle nadie de su entorno más cercano.
Blas Cantó lidera la delegación española en Eurovisión 2021, en la que también están sus cinco coristas --Alba Gil, Héctor Artiles, Daira Monzón, Irene Alman y Dángelo Ortega-- con los que ha trabajado muchos años y "forman parte" de su vida.
El escenógrafo austriaco Marvin Dietmann es el encargado de crear la puesta en escena del representante español.
Después de la gala del sábado, para la que ha estado trabajando y preparándose durante dos años intensos, va a descansar brevemente y se pondrá a trabajar en el nuevo proyecto discográfico, en el que incluirá 'Voy a quedarme' y en fechas de conciertos.
VECINOS DE RICOTE APOYARÁN AL CANTANTE
El Ayuntamiento de Ricote, pueblo murciano de unos 1.200 habitantes donde Blas Cantó nació y creció, ha anunciado que va a instalar una pantalla gigante en el Parque Huerto de Celestino de la localidad el próximo sábado para poder seguir el festival, desde las 20.30 horas.
Cumpliendo todas las medidas de seguridad sanitarias, medio centenar de vecinos y familiares de Blas Cantó podrán seguir la actuación desde el céntrico parque.