MURCIA 27 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal asentada en Totana y dedicada a la comisión de robos con violencia e intimidación con armas blancas, robos en viviendas habitadas incluso con los moradores en el interior, hurtos, estafas con tarjetas bancarias sustraídas, daños, lesiones, amenazas y receptación.
La operación 'Tirolkis', iniciada el pasado año, se ha saldado con la detención de 20 personas, de nacionalidad española, marroquí, ecuatoriana, ghanesa, cubana, rumana y paraguaya y con edades comprendidas entre los 16 y los 48 años, residentes en Totana, y la mayoría de ellos con antecedentes, a los que se les imputa la presunta autoría de 51 robos hasta el momento. Tres de ellos han ingresado en prisión y la mayoría de los arrestados son menores de 25 años.
Tras detectar un incremento de robos en viviendas en dicha localidad el pasado año, la Guardia Civil inició la investigación orientada a esclarecer esta actividad delictiva que estaba generando cierta alarma social entre la población.
Tras meses de investigaciones, los agentes pudieron constatar que se trataba de un grupo delictivo muy peligroso compuesto una veintena de miembros. Su perfil correspondía a jóvenes menores de 25 años, vecinos de Totana y que se organizaban para la comisión de los hechos delictivos, todo ello con el fin lucrativo dado que ninguno de los integrantes realizaba ningún trabajo y la mayoría tenía adicciones a drogas y numerosos antecedentes por la participación en hechos delictivos.
El laborioso trabajo de investigación y análisis de la información recabada ha permitido a la Benemérita obtener indicios sobre la identidad de todos los integrantes del grupo delictivo y del amplio historial de delitos que se les atribuye.
Entre los 51 delitos esclarecidos se encuentran nueve robos con violencia e intimidación cometidos abordando a las víctimas de madrugada en las vías públicas de la localidad de Totana y, tras ser amenazadas con armas blancas además de golpeados, les sustraían los efectos que portaban.
A algunas de ellas les obligaban incluso a ir al cajero y una vez en el interior marcar el número PIN para extraer el dinero de la cuenta corriente, después de ser coaccionados para que no denunciaran los hechos. Si eran descubiertos por alguna persona también la amenazaban para que no declararan lo que habían visto.
En una de las ocasiones uno de los más peligrosos integrantes del grupo, armado con un machete de grandes dimensiones en su mano derecha, ya de madrugada entró en un local de la localidad y tras amenazar al camarero le arrebató el efectivo y salió del establecimiento tranquilamente después de cometer el robo.
También cometían agresiones a cualquier persona para intimidar, además de daños en los turismos de las víctimas o testigos. La mayoría de los robos que cometían en las viviendas habitadas de la localidad eran con escalo, sin romper nada, habiendo esclarecido 28 de delitos de este tipo, muchos de ellos con los moradores durmiendo.
Mientras unos cometían el hecho otros vigilaban y marcaban previamente las viviendas en las que posteriormente se cometían los hechos. En alguna de las viviendas sustrajeron cartillas bancarias con sus correspondientes números secretos que les permitían realizar reintegros de dinero en metálico de cajeros automáticos.
En uno de los robos con fuerza en vivienda atribuido al grupo delictivo desmantelado se pudo detener a de sus integrantes cuando tenía dos escopetas preparadas para ser sustraídas, gracias a la colaboración ciudadana que alertó de su inminente comisión. Además, se recuperaron dos ventiladores que ya había vendido.
Tras obtener todos los indicios necesarios y durante las distintas fases de la operación, la Guardia Civil ha arrestado a los integrantes del grupo delictivo, que en total suman 20 detenidos y dos investigados, entre ellos tres de los miembros más peligrosos y dirigentes del grupo.
Debido a la manifiesta peligrosidad de estos jóvenes se tuvieron que planificar apostaderos para sorprenderlos, dado que en una de las ocasiones se intervino a uno de los miembros una navaja utilizada para la comisión de uno de los hechos esclarecidos
Fruto de la investigación, los agentes han ubicado un inmueble -un piso embargado por una entidad bancaria- que usaban para guardar los efectos sustraídos antes de comercializarlos y, previa autorización judicial, se ha llevado a cabo la entrada y el registro del mismo.
En el mismo se han incautado numerosos efectos sustraídos en los robos, como ordenadores portátiles, monitores, televisores, teléfonos móviles, tabletas electrónicas, perfumes, ropa, calzado, joyas, bebidas alcohólicas, ventiladores, armas blancas, dos escopetas, bisutería, dinero en efectivo, mochilas, carro de compras, todo ello valorado en más de 60.000 euros.
Por las vigilancias desarrolladas y el rastreo de los efectos sustraídos se ha identificado y detenido a una persona que se dedicaba a receptar los objetos que el grupo criminal sustraía, a la que también se le han incautado objetos procedente de robo.
Los detenidos, los objetos incautados y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Totana, que ha ejercido la dirección judicial de la operación y ha ordenado el ingreso en prisión de tres de los arrestados, así como a uno de los menores en un centro de reforma.