MURCIA, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
Una veintena de voluntarios de Cáritas ha estado trabajando "desde el primer momento" de la llegada de la última oleada de pateras a las costas de la Región para llevar alimentos a la Hospitalidad de Santa Teresa, donde se alojaron a las mujeres, y al pabellón donde estaban los hombres, con el fin de darles de comer.
La consejera seglar de Cáritas en Cartagena, Petri García Pérez, asegura que hace unos días diferentes instituciones sociales se reunieron con la alcaldesa de Cartagena, Ana Belén Castejón. "Nos preguntó si estaríamos dispuestos a colaborar cuando llegaran las pateras y Cáritas, por su puesto, dijo que sí", explica.
Tras la primera llegada de pateras, el viernes por la noche, desde Servicios Sociales llamaron a los responsables de Cáritas Cartagena para preguntar si podían ayudar con alimentos. "Nos pidieron leche y magdalenas, para unas 300 personas, porque todavía no se sabía el número exacto de los que iban a llegar", ha recordado.
A las 22.30 horas, "lo llevamos a la Hospitalidad de Santa Teresa y a uno de los pabellones que habían habilitado", señala la consejera seglar de Cáritas en Cartagena. Esa sería la primera llamada pidiendo la colaboración de Cáritas, que también preparó 600 bocadillos y fruta para las comidas de sábado y domingo; y pizzas y fruta para las cenas de los dos días.
"Los bocadillos los hicimos pensando en que pudieran comérselos, por eso no los hicimos de carne, sino de caballas con tomate. Gracias a Dios, teníamos un acopio grande de pizzas en el comedor y pudimos darles las dos noches de cenar", destaca García.
De momento, este lunes no se ha solicitado la ayuda de Cáritas. "Anoche llevamos los zumos para que esta mañana pudieran tomar algo y hoy, según nos explicaron, distribuirían a los inmigrantes en los diferentes centros de detención de la Región de Murcia", ha precisado.
Aun así, según la consejera seglar de Cáritas en Cartagena, están preparados por si en cualquier momento se precisara de nuevo su colaboración, "para responder lo más rápido y eficientemente posible".
La ayuda que Cáritas Cartagena ha prestado este fin de semana ha sido posible gracias a veinte voluntarios que colaboran en el Comedor 'Jesús, Maestro y Pastor', en el Economato y en el proyecto 'Ola de frío'.
"Ha sido un fin de semana muy intenso, pero lo hemos hecho con mucho cariño. Fue emocionante que el día que el Papa nos invitaba a estar cercanos a los pobres nosotros estuviéramos en ese momento trabajando tan de lleno, la verdad es que nos ha llenado muchísimo. Los voluntarios están contentísimos del trabajo realizado" señala destaca Petri García.