El Centro de Restauración de la Comunidad Autónoma ha intervenido la imagen, cuya policromía se encontraba muy alterada
MURCIA, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Cristo de la Salud de Espinardo, obra de José Planes, lucirá restaurado durante sus cultos cuaresmales, según ha anunciado la consejera de Turismo, Cultura, Juventud y Deportes, Carmen Conesa.
"Espinardo está de enhorabuena por la restauración de la imagen de su Patrón, el Cristo de la Salud, y la Región lo está también por la recuperación de una notable escultura de José Planes, un hijo ilustre de esta población", ha señalado Conesa.
La consejera ha hecho estas declaraciones en el acto de entrega del crucificado, recién rehabilitado por el equipo del Centro de Restauración de la Comunidad Autónoma, que tuvo lugar en la parroquia de San Pedro de la barriada murciana, al que ha asistido el obispo de la Diócesis, también nacido en ella, José Manuel Lorca.
La consejera de Cultura ha resaltado que "el Gobierno regional sigue atendiendo a la necesidad de recuperar y conservar nuestro patrimonio a través del Centro de Restauración, cuyo equipo de excelentes profesionales no sólo aborda los delicados trabajos con precisión y criterio, sino que través de su trabajo descubre facetas de las obras tratadas que permanecían ocultas".
"En este caso, una compleja y profunda restauración ha recuperado, en toda su integridad, la obra de Planes, muy alterada desde el punto de vista de la policromía por una intervención anterior que modificó por completo la original", ha afirmado.
Además, durante los trabajos llevados a cabo desde el pasado mes de noviembre, se han tratado pérdidas y desgastes y se ha llevado a cabo la reintegración de la policromía original, "por lo que hoy Espinardo puede disfrutar de la contemplación de su venerado Cristo de la Salud tal y como lo presentó José Planes en 1947, y recibirá la veneración de los fieles durante los tradicionales cultos cuaresmales luciendo en todo su esplendor".
El Cristo de la Salud es una escultura de José Planes, realizada para sustituir a una que ocupó durante unos años el lugar de la destruida durante la Guerra Civil.
El cuarto domingo de Cuaresma es trasladada en procesión desde su ermita hasta la iglesia de San Pedro y Nuestra Señora del Carmen de Espinardo, en la que se le dedican los cultos cuaresmales, siendo nuevamente llevado a su ermita el Viernes Santo, por la Hermandad del Cristo de la Salud, en un solemne Vía Crucis. Regresa por segunda vez a la parroquia en el mes de junio, con motivo de las fiestas de Espinardo.