MURCIA, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional han detenido a cuatro personas, dos mujeres y dos hombres de nacionalidad rumana y de edades comprendidas entre los 33 y 43 años de edad, como presuntos responsables de trata de seres humanos para matrimonios forzosos, abuso sexual, malos tratos en el ámbito familiar y abandono de menores en Murcia.
La investigación se inicia en el mes de junio cuando los padres de una menor rumanos y residentes en esta ciudad, vendieron a su hija de 12 años a unos familiares por 500 euros, también de origen rumano, para que se casara con un joven de 19 años.
La menor estaba sufriendo malos tratos tanto físicos como psicológicos por parte de su progenitora ante la negativa de ésta a seguir conviviendo con su esposo y querer regresar al domicilio familiar, según han informado fuentes policiales.
Asimismo por parte de este grupo de menores se tuvo conocimiento que el matrimonio que había comprado a ésta menor había vendido a su hija de once años a otro clan familiar por importe de 1.500 euros y en la actualidad se encontraría en su país de origen en avanzado estado de gestación.
Según han explicado fuentes policiales, estos clanes familiares de origen rumano-gitano disfrazan la compra de estas menores como acuerdos previos de noviazgo, alegando el pago que se realiza como una dote.
Los matrimonios por el rito gitano-rumano, no son legales en España ni en Rumanía, donde la edad para poder contraer matrimonio y mantener relaciones sexuales son los 18 años, salvo dispensa.
Por otro lado la familia receptora de la menor tiene que rentabilizar la aportación económica que efectúan a la familia de la niña, por la que estas menores son, en muchos casos, obligadas a realizar actividades no acordes con su edad, tales como la mendicidad, recogida de chatarra e incluso actividades ilegales como pequeños hurtos o robos y en algunos casos la prostitución.
El operativo policial ha sido llevado a cabo por funcionarios del Grupo de Menores de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de la Región de Murcia.