Detenido un conductor por cuadruplicar la tasa máxima de alcoholemia y circular con exceso de velocidad

Fue sorprendido en un control de velocidad cuando circulaba a 142 km./h. en un vía con limitada a 100 km./h.

MURCIA, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil de la Región de Murcia ha detenido al conductor de un turismo que circulaba por la carretera RM-19 (Puerto de la Cadena-San Javier), término municipal de Murcia, a 142 kilómetros por hora en vía limitada a 100 kilómetros por hora. Además, arrojó positivo al control de alcoholemia.

Los hechos se produjeron cuando una patrulla del Destacamento de Tráfico de Cartagena, que se encontraba prestando servicio específico de verificación de velocidad con cinemómetro móvil, detectó un vehículo que circulaba, sentido Murcia, a 142 kilómetros por hora, estando la vía limitada a 100 kilómetros por hora.

Los agentes dieron el alto al conductor para notificarle la infracción cometida por exceso de velocidad. Se trata de un varón, de 38 años y nacionalidad española que, además, presentaba evidentes síntomas de estar bajo los efectos de las bebidas alcohólicas, por lo que fue sometido a las pruebas de alcoholemia en las que arrojó un resultado de 0,98 y 1,02 miligramos por litro en aire espirado, cuadriplicando la tasa máxima permitida de 0,25 miligramos por litro.

Por todo ello ha sido detenido como presunto autor de delito contra la seguridad vial por conducir con una tasa de alcohol superior a 0,6 miligramos por litro.

Además ha sido denunciado ante la Jefatura Provincial de Murcia por circular a 142 kilómetros/hora superando la velocidad máxima permitida de 100 km/h, y se enfrenta a la imposición de una sanción de 300 euros y a la pérdida de 2 puntos de su permiso de conducción.

El arrestado y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de los de Murcia, para la celebración del correspondiente juicio rápido.

La Guardia Civil recuerda que el delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, con tasas superiores a 0,60 miligramos/litro, se encuentra recogido en el artículo 379 del Código Penal y puede ser castigado alternativamente con penas de prisión de 3 a 6 meses, multa de 6 a 12 meses, o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y en cualquier caso con privación de derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a 1 y hasta 4 años.

En estos supuestos, los vehículos afectados son inmovilizados por la Guardia Civil hasta que sus conductores se encuentren en condiciones de proseguir viaje, una vez que hayan rebajado el nivel de alcoholemia dentro de los límites permitidos o desaparecida la presencia de drogas en el organismo, o bien, se hagan cargo de los vehículos otros conductores que se encuentren habilitados y previas las pruebas oportunas, como en este caso.

El establecimiento de los controles de velocidad por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil se enmarca dentro los objetivos de la Estrategia de Seguridad Vial adoptada por la DGT para el decenio 2011-2020, como una de las prioridades orientadas a la reducción de la siniestralidad en nuestras carreteras, especialmente en las vías convencionales o secundarias, como en este caso, habida cuenta de que los excesos de velocidad, por un lado incrementan considerablemente el riesgo de sufrir accidentes de circulación y por otro son factores que inciden directamente en la mortalidad y en la gravedad de las lesiones sufridas.

En este sentido, la Benemérita, sin perjuicio de las campañas específicas de control de velocidad establecidas anualmente por la Dirección General de Tráfico, recuerda que la actividad de control de la velocidad se desarrolla durante las 24 horas del día, en especial en aquellos tramos y puntos de carretera que por sus especiales características llevan implícito un riesgo de accidentalidad o son propensos para cometerse este tipo de infracciones, apelando a los conductores para que se conciencien de la importancia de respetar las limitaciones de velocidad establecidas, en aras a mejorar su propia seguridad y la de la circulación en general.

Además, la Guardia Civil reitera su mensaje a aquellos conductores que de forma imprudente y temeraria, a pesar de las campañas y advertencias de la DGT, conducen después de haber bebido o tomado alcohol o drogas, recordando que se están intensificando los controles a cualquier hora del día o de la noche y en cualquier carretera, con la finalidad de concienciar a los ciudadanos de la incompatibilidad de estas sustancias con la conducción de vehículos.