El denunciado contactó presuntamente con la víctima a través de redes sociales y la convenció para trasladarse a España con falsas promesas
MURCIA, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional ha detenido en San Javier (Murcia) a un individuo de 67 años que contactó con una mujer a través de redes sociales y la convenció presuntamente para trasladarse a España con falsas promesas laborales. Una vez en la Región, habría sido explotada laboralmente y sometida a abusos sexuales, según informaron fuentes del citado Cuerpo en un comunicado.
Por todo ello, el individuo ha sido detenido acusado de haber cometido presuntamente delito de trata de seres humanos, abuso sexual, contra el derecho de los trabajadores y favorecimiento de la inmigración clandestina.
Los agentes de Policía Nacional de la Región de Murcia tuvieron conocimiento de la existencia de esta mujer de origen venezolano que manifestaba estar trabajando como interna para el cuidado de una persona de avanzada edad en una vivienda de San Javier (Murcia).
La víctima manifestó que había venido desde Venezuela expresamente para realizar dicho trabajo tras contactar con un varón al que conoció a través de una red social. Según la mujer, el individuo que le convenció para trasladarse a España y se ofreció a sufragar los gastos de su desplazamiento.
El detenido le ofreció unas condiciones laborales que, una vez en España, resultaron ser muy distintas de las prometidas. Y es que la víctima tenía que estar disponible las 24 horas del día, 7 días a la semana, por un sueldo de apenas 300 euros, de forma que el acusado se aprovechaba de su vulnerabilidad y dependencia económica.
La víctima se habría visto obligada a compartir habitación con el varón, limitándole el acceso incluso al agua para poder hidratarse correctamente. Además, bajo promesas de "amor y cariño", el individuo la habría coaccionado para mantener relaciones sexuales a cambio de regularizar su situación administrativa en España.
El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Murcia en funciones de guardia, decretando una orden de alejamiento con respecto a la víctima y su puesta en libertad a la espera de juicio.