MURCIA 17 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Dirección General de Tráfico (DGT) recomienda, en caso de conducir con nieve en el asfalto, reducir la velocidad, encender el alumbrado de cruce y aumentar la distancia de seguridad, así como circular por las rodadas de otros vehículos y evitar manejar con brusquedad el volante, el acelerador y el freno.
"Para iniciar la marcha no acelere, suelte suavemente el pie del acelerador", según explica la DGT, que recuerda que la nieve oculta las señales y marcas viales, al tiempo que reduce la visibilidad del conductor y puede producir sensación de mareo. De hecho, añade, con los primeros copos la calzada se vuelve muy deslizante; y, a medida que crece el espesor, las dificultades aumentan y no se podrá circular si no se llevan cadenas.
La jefa provincial de Tráfico, Virginia Jerez, ha destacado que lo principal ante avisos meteorológicos como el que va a producirse estos días en la Región debido a la ola de frío es "estar informados". Ante condiciones meteorológicas adversas y la conducción, lo fundamental primero "es saber cuáles son las condiciones del tiempo que nos vamos a encontrar en nuestro desplazamiento", ha matizado.
La nieve, según la DGT, es el fenómeno meteorológico más llamativo de todos. No es habitual que llegue a cubrir las ciudades y sus vías de acceso, aunque sí tiene presencia en las carreteras de zonas montañosas o altas y frías.
Por ello, la accidentalidad es baja, aunque suele provocar importantes contratiempos que solo es posible solucionar con la intervención de las máquinas quitanieves y la extensión de fundentes. Si cada conductor lleva cadenas en el maletero y las instala en caso necesario, "se reducen los inconvenientes".
HIELO: PELIGRO INVISIBLE
En cuanto al hielo, la DGT reconoce que es menos llamativo que la nieve, pero resulta más peligroso ya que, habitualmente, no se detecta hasta que no se pisa una placa.
Entre los riesgos, advierte que la adherencia de un vehículo sobre el hielo es crítica, mucho menor que sobre nieve. Además, señala que el hielo suele ocultarse en umbrías, resguardos orientados al norte y puentes sobre ríos. Además, al derretirse la nieve, el agua que se desliza por el asfalto en las zonas peraltadas puede helarse al caer la noche.
En estas situaciones, la DGT recomienda reducir la velocidad y extremar la suavidad de movimientos al actuar con el volante, el freno y el acelerador. "Si su coche mide la temperatura externa, manténgase alerta y desconfíe cuando se sitúe a partir de 3 grados sobre cero, que es cuando comienza a helar", añade.
Si se pisa una placa de hielo, la DGT recomienda levantar suavemente el pie del acelerador y tratar de controlar la trayectoria con movimientos suaves del volante; y si debe frenar, "hágalo también con suavidad para no bloquear las ruedas, salvo que lleve ABS, con el que puede frenar a tope", puntualiza.
Asimismo, la DGT explica que las cadenas se colocan en el eje de tracción. Las textiles se acoplan a la rueda como una funda, pero para cubrir la parte del neumático que se apoya en el suelo, deberá avanzar media vuelta de rueda.
Para las metálicas, explica que se debe desabrochar primero el aro rígido e introducir un extremo por detrás de la rueda, deslizándolo por el suelo. "Tome los dos extremos, compruebe que ningún trozo de la cadena queda aprisionado por la rueda, cierre el aro interior y céntrelo bien por detrás del neumático".
A continuación, explica que hay que cerrar el anillo exterior y centrar el conjunto de la cadena sobre la zona de rodadura y flancos del neumático. Finalmente, hay que apretar con el tensor y enganche el sobrante de la cadena para que no golpee en el paso de rueda.