"Es verdad que el Gobierno de Zapatero asesinó el trasvase del Ebro, pero ahora parece que lo quieren enterrar definitivamente", lamenta
MURCIA, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ex presidente del Gobierno regional, Alberto Garre, ha considerado que el Ejecutivo regional "pierde gas" al no llevar el tema del déficit hídrico a la Conferencia de Presidentes y pone de manifiesto "cierta debilidad que en otro tiempo no tuvimos", perdiendo "una oportunidad para reivindicarse ante el Gobierno de la nación, solicitando algo que la Región le pide permanentemente desde hace muchísimos años".
En concreto, ha recordado que el Gobierno regional no tuvo en el pasado esa "debilidad" porque el ex presidente Ramón Luis Valcárcel "siempre fue reivindicativo en temas de agua" y consiguió incluir ese asunto entre los asuntos del día de la Conferencia de Presidentes de 2007 y 2009.
Garre, quien sigue siendo presidente del Comité de Derechos y Garantías del PP regional, expresó estas ideas este miércoles en el transcurso de un encuentro al que fue invitado por la Asociación de Mujeres Rurales, tal y como ha reconocido él mismo en declaraciones a Europa Press.
"Parece como si hubiera una especie de relajación en un asunto en el que yo creo que se debe estar permanentemente en alerta porque seguimos teniendo un déficit estructural de agua sin el que la Región de Murcia no puede salir adelante", según Garre. Se trata, añade, del principal problema que tiene la Cuenca del Segura y la Región desde hace "muchísimos años".
En este sentido, ha criticado el hecho de que no se abordara el asunto en la Conferencia de Presidentes que tuvo lugar este martes, ya que es un órgano que se encarga de tratar los temas que "afectan a todos", y el agua "es un asunto de competencia nacional porque no afecta solo a la Región de Murcia sino a todo el sureste español, donde hay pueblos enteros que no disponen de agua".
Al ser preguntado por el hecho de que el presidente de la Comunidad, Pedro Antonio Sánchez, sacara a relucir el tema del agua durante su intervención en la Conferencia, Garre ha señalado que el resto de participantes en el encuentro "ya saben que tenemos un problema con el déficit hídrico en Murcia".
Sin embargo, explica que "no sirve de nada" si el tema no está incluido en el orden del día para debatirlo y adoptar resoluciones que puedan paliarlo. El hecho de hablarlo "sirve solo para que salgan esas palabritas en prensa", según Garre, quien considera que no basta con preocuparse, sino que "hay que afrontar los asuntos con toda la fortaleza que requiere un asunto de esta naturaleza".
Garre se pregunta si se ha solicitado la incorporación de este tema entre los asuntos del día de la última Conferencia de Presidentes, algo que "no sabemos porque nadie ha dado respuesta". En caso de haberse solicitado, quiere saber "quién ha decidido que ese asunto no se incluya".
"CASI UN CHISTE"
Por ello, ha considerado "casi un chiste" que se diga ahora que se va a solucionar el asunto del agua en la Región de Murcia hablando con el presidente de Castilla-La Mancha, porque es "como querer entrar en la gloria cogido de la mano del diablo" o como "querer solucionar una mancha en la chaqueta haciendo un agujero".
En este sentido, ha reconocido que a los manchegos les asiste "alguna razón" porque ellos dicen que "hay ríos más caudalosos que vierten más agua al mar". Sin embargo, Garre lamenta que "nos olvidemos del Ebro". Además, afirma que "no se puede cerrar el trasvase del Tajo porque también sería una propuesta profundamente insolidaria".
Garre ha recordado que el 18 de junio de 2004, la ex ministra de Agricultura, Cristina Narbona, y el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "aprobaron un decreto que se cargó el trasvase del Ebro que estaba incluido en el Plan Hidrológico Nacional (PHN) que había elaborado el Ejecutivo de José María Aznar".
Por cierto, cree que "deberían leer también a Aznar", porque fue él quien dijo que la mejor manera de vertebrar España era a través del agua. "Deberían tomar buena nota de sus palabras", según Garre, quien lamenta que "ya nadie pronuncia la palabra Ebro".
"Es verdad que el Gobierno de Zapatero asesinó el trasvase del Ebro, pero ahora parece que lo quieren enterrar definitivamente como un cadáver, como si no existiera un río tan caudaloso como el Ebro que en los años de sequía vierte más de 10.000 hectómetros cúbicos de agua al mar". Con una décima parte de ese volumen, añade Garre, se podrían solucionar todos los problemas del sureste.
Se pregunta "por qué nadie habla de eso" y por qué los programas electorales de los partidos a nivel nacional no ponen en sus programas electorales la palabra 'trasvase', ya que se trata de la "mejor solución" y lo demás "son parches".
Y es que si los partidos nacionales no hacen alusión a la palabra trasvase, "con este tipo de partidos que tenemos hoy que dominan absolutamente casi todo, pues a nivel regional nadie se atreve tampoco a hablar de la palabra trasvase, y mucho menos del Ebro".
A este respecto, remarca que solo hay una persona en la Región que reivindica los trasvases, y es el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, Lucas Jiménez, pero Garre no oye a nadie más hablar de eso. "Y yo quiero seguir reivindicando esos nuevos trasvases, porque según la Ley del Agua de 1985, que se aprobó con una mayoría socialista, el agua es del patrimonio hidráulico nacional", ha aseverado.
Además, ha recordado que, según el artículo número 2 de la Constitución, España es un país compuesto por comunidades "interrelacionadas por la solidaridad que debe haber entre todas ellas", y el artículo 45.2 de la propia Carta Magna, los recursos naturales del Estado "tienen ser debidamente establecidos".
Ha reivindicado que hay muchos estudios científicos que indican que esos trasvases "son posibles", y hay una normativa constitucional en torno a los trasvases que indica que es necesario hacerlo. A su juicio, quien no actúe conforme a esos principios de solidaridad, de alguna manera "está traicionando los intereses generales del Estado".
Garre se pregunta "por qué tenemos que abandonar esos nuevos proyectos que producen riqueza y, por lo tanto, influyen sobremanera en el PIB". Sin ellos, la Región "puede verse abocada a un fracaso estrepitoso", advierte el ex presidente, quien asegura que él no va a abandonar esa bandera, y espera que los que tienen responsabilidades nacionales y regionales "no lo hagan tampoco".
"Todo lo que he dicho ha sido el ideario del PP durante muchísimos años, por eso lo más sorprendente es que hoy se nos olvide, y habrá que recordarlo aquí y donde sea", ha señalado Garre.
Respecto a su futuro, Garre ha desmentido que él tenga intención de fundar ningún partido político, y ha aclarado que él sigue siendo afiliado del PP. No obstante, ha puntualizado que "el voto no es cautivo, tal y como dice Aznar", y "tampoco lo puede ser la afiliación".
En su opinión, "lo que hay que hacer es recuperar los valores que teníamos y caminar por la senda del ideario político que forjó unas mayorías aplastantes en España" y "no escorarnos tanto como se están escorando actualmente".