Imagen de la zona incendiada en Calasparra
GUARDIA CIVIL
Actualizado: lunes, 20 marzo 2017 16:23

Una persona ha resultado investigada como presunta autora de delito contra la seguridad colectiva, por incendio forestal

MURCIA, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil de la Región de Murcia, en el marco de la operación 'PYROS', ha desarrollado una investigación dirigida a esclarecer las causas de dos incendios que, el pasado mes de febrero, arrasaron cuatro hectáreas de masa forestal en el término municipal de Calasparra.

La operación se ha saldado con una persona investigada como presunta autora de delito contra la seguridad colectiva, por incendio forestal intencionado, según informaron fuentes de la Benemérita en un comunicado.

Las actuaciones se iniciaron cuando la Benemérita investigaba las causas de un incendio forestal, ocurrido en los primeros días del mes de febrero en una zona próxima a la vía férrea, sita en el paraje el Peralejo del término municipal de Calasparra.

Debido a la espesa masa forestal existente, el fuego calcinó cerca de 200 metros cuadrados de masa forestal, para cuya extinción fue necesario un amplío despliegue de medios en el que participaron dotaciones de bomberos, retenes de agentes forestales, así como efectivos de la Guardia Civil y de la Policía Local.

Por especialistas del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil se iniciaron las labores necesarias para la investigación de la causa y el origen del fuego, con la elaboración del correspondiente informe técnico y fotográfico, así como con la obtención de información de posibles testigos.

La investigación desarrollada permitió constatar indicios de intencionalidad en el origen del fuego. Además, paralelo a la investigación, la Guardia Civil reforzó los servicios específicos dirigidos a la prevención de incendios, con exhaustivas vigilancias de las zonas forestales próximas a la vía férrea, a su paso por el término municipal de Calasparra.

A finales del mes de febrero, en tanto avanzaba la investigación, se produjo un nuevo incendio forestal en una zona próxima a la del primer caso, en la que resultaron calcinadas más de tres hectáreas de pino, monte bajo y retama.

INESTIMABLE COLABORACIÓN CIUDADANA

Vecinos de la zona, que se encontraban realizando labores agrícolas, alertaron al 1-1-2 del suceso, lo que originó el despliegue de medios contra incendios.

Al lugar acudieron unidades de la Guardia Civil, Policía Local y agentes medioambientales que, junto a vecinos de la zona que colaboraron voluntariamente, lograron la extinción del incendio y evitar su propagación.

Simultáneamente, se iniciaron las labores de reconocimiento de la zona para averiguar las causas y origen del fuego lo que, unido a la colaboración de testigos presenciales, permitió determinar la intencionalidad de los fuegos, así como ubicar a una persona en el lugar y hora en que se iniciaron.

La Guardia Civil realizó una batida por la zona y localizó a una persona, a la que le fue intervenido un mechero, así como gran cantidad de fármacos -antidepresivos y antipsicóticos-, de utilidad psiquiátrica.

En el curso de las investigaciones se localizó, junto al punto de ignición del fuego, un blister de medicamentos similar a los hallados entre las pertenencias del sospechoso. Además, el vehículo propiedad de esta persona fue ubicado en el mismo lugar y momento en que se originó el incendio, estacionado en las inmediaciones.

A la vista de los indicios y testimonios obtenidos, la Guardia Civil ha culminado la operación 'PYROS' con la instrucción de diligencias como investigada a una persona -varón, de 29 años, vecina de Caravaca de la Cruz- como presunta autora de delito contra la seguridad colectiva, por incendio forestal intencionado.

Hasta el momento, se han esclarecido dos delitos de incendio forestal, relativos a la seguridad colectiva, por los incendios forestales ocurridos los días 4 y 23 de febrero en el término municipal de Calasparra, atribuidos, presuntamente, a la persona investigada.

Las diligencias instruidas y la persona investigada han sido puestas a disposición del Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción de Caravaca de la Cruz (Murcia).

La Guardia Civil recuerda que los autores de este tipo de hechos pueden incurrir en un delito relativo a la seguridad colectiva, castigado con penas de prisión de uno a cinco años y multas de doce a dieciocho meses.

Además, la Benemérita recuerda que la franja de monte ubicada en el término municipal de Calasparra es rica en zonas catalogadas como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), por lo que constituyen un patrimonio medioambiental de gran valor para la Región de Murcia.

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