MURCIA, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -
El joven de 22 años y nacionalidad española que este lunes mató presuntamente a su expareja, de 20 años y misma nacionalidad, en la diputación cartagenera de Canteras, continuará ingresado en el Hospital Santa Lucía.
Según fuentes de la Guardia Civil, el juez encargado de la instrucción del caso ha tenido conocimiento de las diligencias del caso y se está a la espera de que adopte una decisión al respecto. El detenido, que presenta una herida por arma blanca que precisó cirugía, se encuentra estable y permanece con custodia policial.
Concretamente, el magistrado titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Cartagena ordenó este miércoles la prórroga de la detención de 72 horas para el detenido, según informan desde el Tribunal Superior de Justicia de Murcia (TSJRM).
El '1-1-2' recibía, a las 12.03 horas, la llamada de un vecino informando que había una chica herida por arma blanca en una vivienda de la calle Lucena en la diputación cartagenera de Canteras. Los propios vecinos han conseguido retener al supuesto autor del crimen, que se encontraba escondido, con los que forcejearon en su intento de huida.
Hasta el lugar de los hechos se desplazó una Unidad Móvil de Emergencias del Servicio Murciano de Salud y varias patrullas de Policía Local y Guardia Civil, así como un equipo de psicólogos para atender a los familliares de la víctima.
Aunque los sanitarios desplazados intentaron salvar la vida de la joven, terminó falleciendo pocos minutos después del suceso, por lo que solo pudieron confirmar su fallecimiento.
El individuo fue detenido por la Policía Local tras el dispositivo establecido de manera conjunta con la Guardia Civil.
La joven había denunciado horas antes por acoso y amenazas al joven, de 22 años y, según la Comunidad, no era usuaria de los centros de la Red Regional de Centros de Atención Especializada a Víctimas de Violencia de Género (Red CAVI), dependiente de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades. Se trata de la tercera víctima mortal de la Región como consecuencia de la violencia de género en 2017.