MURCIA 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Región de Murcia ha demandado este martes la autorización de nuevas herramientas fitosanitarias para hacer frente al incremento de plagas emergentes en el campo, ante "la preocupación creciente del sector agrario" por las consecuencias del Reglamento Fitosanitario de la Unión Europea, según informaron fuentes de la Comunidad en una nota de prensa.
Esta ha sido la principal conclusión del encuentro de trabajo mantenido entre la consejera de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Sara Rubira, y representantes de las organizaciones europeas COPA y COGECA, que dan voz a más de 22 millones de agricultores y defienden los intereses de las cooperativas agroalimentarias, forestales y pesqueras.
Rubira ha destacado que España "supera ya las reducciones fijadas en las estrategias de 'La granja a la mesa' y de 'Biodiversidad' para el año 2030, que marcaban una rebaja al 50 por ciento del uso y riesgo de productos fitosanitarios, y la reducción del 50 por ciento del uso de productos fitosanitarios más peligrosos".
"Desde la Región de Murcia compartimos la ambición de la Comisión Europea y los estados miembros de avanzar en el uso sostenible de los productos fitosanitarios, pero esa ambición debe estar basada en el conocimiento científico disponible, y asegurando unas condiciones de igualdad para nuestros agricultores en las que no se vea mermada su competitividad", ha explicado la consejera.
Durante su intervención, ha alertado de que "nuestros agricultores están sufriendo un incremento de los daños ocasionados por las plagas y al mismo tiempo ven reducido el número de productos fitosanitarios para combatirlas, lo que conlleva pérdidas en las cosechas e inseguridad sobre las próximas campañas, algo que solo conlleva a poner más trabas a un sector ya bastante perjudicado".
"Necesitamos que las instituciones europeas y nacionales den un paso adelante en la aprobación de nuevas materias activas, que escuchen a los agricultores y den respuesta a sus necesidades", ha dicho Rubira, que ha añadido que "la legislación debe estar en consonancia con la realidad del campo, debe ofrecer soluciones y no problemas".
Por todo ello, ha reconocido que "dado el incremento de plagas emergentes que se agrava en regiones como la nuestra y otras regiones del Mediterráneo, con una climatología adversa y con pocos días de frío y de lluvias, así como la necesidad de mantener la sostenibilidad alimentaria en la Unión Europea, no podemos avalar nuevos recortes adoptados sin alternativas y sin valorar el efecto económico en las áreas afectadas, así como sin estudio global de impacto social y económico de ésta y otras propuestas relacionadas con el Pacto Verde".
AYUDAS EN MATERIA DE SANIDAD ANIMAL
Durante el encuentro, celebrado en las instalaciones del Comité de Organizaciones Profesionales Agrícolas en Bruselas, también se han analizado otras cuestiones de relevancia para el sector agrario regional como la situación hídrica y la escasez de recursos, la afección de la nueva Política Agraria Común o la importancia de adoptar cláusulas espejo que eviten la competencia desleal.
Del mismo modo, la consejera ha tenido la oportunidad de explicar qué hace la Región de Murcia en materia de sanidad animal, "un asunto que preocupa al conjunto de los estados miembro y para el que se deben impulsar medidas conjuntas si queremos afrontar con garantías los retos a los que se enfrenta el sector".
"Es fundamental ofrecer certidumbre a los productores y a los consumidores, garantizar el movimiento de animales libres de enfermedades y que ello no suponga una pérdida de competitividad para nuestros ganaderos", ha reconocido.
"Hablamos de una realidad que está marcando la actividad en las explotaciones ganaderas y debemos favorecer la unidad de los territorios para implementar medidas encaminadas a evitar la propagación de enfermedades que mermarían la rentabilidad del sector y la confianza de los consumidores", ha sostenido la consejera.
Asimismo, Rubira ha señalado que "en el último año en la Región de Murcia hemos puesto cerca de 450.000 dosis de la vacuna frente a la lengua azul en ovino y bovino, con una inversión superior a 150.000 que se incrementará el próximo año".