MADRID 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha exigido al PP un plan de deportaciones para los inmigrantes ilegales, incluidos los menores de edad, si quiere su apoyo después de que esta semana su formación haya decidido salirse de los gobiernos autonómicos con el PP por la acogida de menores inmigrantes procedentes de Canarias.
"Vamos a exigir un plan de deportaciones para que los niños vuelvan con sus padres, para que los ilegales vuelvan a sus países; y vamos a exigir que la inmigración en España empiece a ser regulada y ordenada", ha puesto el líder de la formación de extrema derecha sobre la mesa como condición a cualquier acuerdo con el partido dirigido por Alberto Núñez Feijóo.
A propósito de su relación con el líder del PP, Abascal la ha calificado de "gélida" y le ha acusado de haber ido de "tapadillo" y de haber boicoteado los resultados que emergieron de las elecciones autonómicas y municipales celebradas en la primavera del pasado año, según ha declarado en una entrevista con 'El Confidencial' recogida por Europa Press.
"Feijóo pretendía llegar a un acuerdo de tapadillo, que le diéramos los gobiernos, que fuéramos a las elecciones [generales del 23 de julio] en secreto y después ya llegábamos a un pacto [...] Yo todo lo que hago, lo hago a la vista del público; yo no negocio por debajo", ha aseverado Abascal sobre las negociaciones llevadas a cabo el año pasado y que se tradujeron en la formación de gobiernos compuestos por PP y Vox en la Comunidad Valenciana, Castilla y León, Aragón, Murcia y Extremadura.
El presidente de Vox ha enmarcado así la decisión de salir de los gobiernos autonómicos como una situación a la que se han visto empujados por el Partido Popular de Feijóo: "Estaban advertidos de que para nosotros eso era un problema insalvable", ha manifestado para seguidamente intuir que él cree que "han tomado una decisión deliberada [en el PP] para que los gobiernos se rompieran".
En cuanto a la posible extensión de esa ruptura con los populares en los ayuntamientos en los que gobiernan juntos, Abascal ha incidido que los consistorios "no han sido los que deciden la recepción" de inmigrantes.
Eso sí, ha advertido de que si algún ayuntamiento colabora de "manera voluntaria" abandonarán ese gobierno municipal.
Preguntado por la posible competición electoral con la agrupación Se Acabó La Fiesta, encabezada por Alvise Pérez y que cosechó 800.000 votos en las elecciones europeas, Abascal ha querido zanjar que ellos toman las decisiones por convicción y no pensando en otros partidos políticos.
"Era verdaderamente duro mantenerse en los gobiernos asumiendo una complicidad con la inmigración ilegal", ha vuelto a incidir el presidente de Vox para posteriormente proseguir que no le preocupa la irrupción de Se Acabó La Fiesta porque los españoles reaccionan "como cada uno cree que tiene que hacerlo contra la corrupción" del Gobierno de Sánchez.