Los grupos abren la puerta a escuchar a los promotores de las iniciativas surgidas en la sociedad civil
MADRID, 28 May. (EUROPA PRESS) -
Los ponentes encargados de la reforma del Reglamento del Congreso han alcanzado un principio de acuerdo que persigue dar voz a los ciudadanos y los grupos de interés o 'lobbies' durante la tramitación de las leyes.
Así lo han explicado los diferentes portavoces a la salida de la reunión que han mantenido este miércoles, en la que ha habido buena sintonía en al menos tres asuntos relacionados con el procedimiento legislativo, el primero de los once bloques en que se dividirá el debate para mejorar las normas parlamentarias, que datan de 1982.
En concreto, las diferentes fuerzas políticas quieren que los promotores de las Iniciativas Legislativas Populares (ILP) puedan dar cuenta a los diputados de sus propuestas, pero aún no han determinado cuál sería el mejor formato, es decir, si podrán comparecer en el Pleno o en comisión.
Mientras el PSOE y la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) abogan por que los impulsores de este tipo de iniciativas ciudadanas puedan explicarse en sesión plenaria y a lo largo de todo el proceso legislativo, el PP tiene dudas de que pueda ser así porque defiende que en el Pleno sólo pueden intervenir los representantes de los ciudadanos, con la única excepción del Defensor del Pueblo.
Asimismo, los ponentes han puesto encima de la mesa la necesidad de facilitar la recogida de firmas para las ILP --la Constitución exige 500.000 para poder presentarla-- a través de un formato electrónico y en la página web del Congreso.
IMPULSAR LA PÁGINA WEB
Además, hay consenso para abrir el portal web de la Cámara para que los ciudadanos puedan hacer sugerencias por escrito y para que los grupos de interés (lobbies) o los afectados por una determinada ley puedan pedir audiencia ante los diputados.
De la misma forma, hay acuerdo sobre la conveniencia de que el Gobierno remita al Congreso para su publicación en la página de Internet de la Cámara toda la documentación relativa a los proyectos legislativos, como ha pedido, por ejemplo, el Grupo Socialista.
Los grupos también comparten la necesidad de diferenciar el papel del Pleno y el de las ponencias y las comisiones. En concreto, quieren reservar para el hemiciclo los debates eminentemente políticos --los que versan sobre los principios generales de las leyes y su oportunidad-- y dejar para la ponencia y la comisión los aspectos más técnicos.
En este punto, PSOE e IU defienden que todos los proyectos de ley que apruebe el Gobierno sean sometidos a un debate en el Pleno, algo que ahora sucede sólo si algún grupo presenta una enmienda de totalidad pidiendo su devolución al Gobierno.
Además, para dar más importancia a las ponencias, el PP ha propuesto que en cada ley se nombre un ponente que dirija el trabajo en esta fase, siguiendo el modelo de los parlamentos europeo, británico o francés. Queda por concretar cómo se designaría a cada ponente y también decidir si el trabajo de las ponencias, que ahora se realiza a puerta cerrada, podría hacerse público como las comisiones.
NO BASTA CON UNA REFORMA "PARCIAL"
El portavoz del PSOE, Pablo Martín Peré, ha destacado el alto grado de acuerdo que existe en torno a estos asuntos, mientras que desde la Izquierda Plural, su portavoz, José Luis Centella, también ha reconocido que se han producido "avances". No obstante, ha insistido en que a ellos no les basta con una "reforma parcial", sino que hay que acometer cambios profundos en el funcionamiento de la Cámara para dar satisfacción a las demandas que, en este sentido, hacen los ciudadanos.
Tanto Izquierda Plural como el PSOE han elogiado la disposición a hacer cambios que ha mostrado la nueva portavoz del PP en esta comisión, Arenales Serrano, que ha sustituido al exdiputado Ignacio Astarloa, gran conocedor del Reglamento, por haber sido secretario general de la Cámara.
Tras su estreno en la comisión, Serrano ha querido dejar claro que el PP quiere hacer un reglamento "de todos y para todos, moderno y que garantice la calidad legislativa", pero sobre todo que sirva para hacer una Cámara "cercana y abierta" a los ciudadanos.
Los ponentes se han citado para el próximo 7 de julio, día en el que esperan ya poder poner negro sobre blanco un texto articulado con las propuestas sobre las que han avanzado. Para ello, habrá reuniones en junio con el fin de concretar algunos asuntos que se han quedado en el aire o que no han definido suficientemente.