MADRID 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
El hombre juzgado este martes en la Audiencia Nacional por enaltecimiento del terrorismo tras difundir mensajes en las redes sociales en favor de ETA y GRAPO ha justificado su comportamiento por la medicación que toma por el trastorno psicótico que sufre, por el que ha estado internado varias veces desde la adolescencia. "Si la tomo, organizado; si no la tomo, la he cagado entera. Estoy medicado y moriré medicado", ha dicho.
El acusado ha explicado que toma medicación desde hace años, una medicación que es "todo química" y que "cada año o año y medio se desajusta", momento en que ha admitido que no es "consciente del daño" que puede hacer con sus comentarios.
Durante el juicio, ha reconocido haber publicado "un montón de cosas", pero sólo "el 75 por ciento" de los mensajes que figuran en el escrito de acusación. Según ha asegurado, el otro 25 por ciento no lo ha escrito él, aunque no ha sabido decir qué comentarios exactamente porque no los recordaba. Eso sí, ha añadido además que en los mensajes de los que se responsabiliza no hizo sólo apología del terrorismo de ETA, sino "del terrorismo a nivel mundial".
Tanto una doctora forense como el propio médico del acusado han confirmado el trastorno psiquiátrico y la medicación que toma, pero mientras la primera ha aconsejado "periodos de ingreso" hasta que mejore, el segundo no lo considera necesario, sino que es preferible que siga como hasta ahora.
COMPONENTE CULTURAL POR VIVIR EN EL PAÍS VASCO
La doctora forense ha explicado que la enfermedad del acusado "se caracteriza por delirios y alucinaciones con alteraciones afectivas" y que en el País Vasco, donde ha crecido y vive, se añade un "componente cultural" que hace que personas con este tipo de trastornos "piensen que son perseguidos por las fuerzas de seguridad o por grupos radicales".
Según ha indicado, "la ideología política" del acusado está "vinculada con la propia enfermedad" y es que sus argumentos políticos se basan en "un pensamiento muy superficial, más asociado con eslóganes o titulares de periódico". "Existe un componente patológico", ha apuntado.
Los dos médicos han confirmado la importancia de que el acusado siga tomando la medicación, pues, según su doctor, tiene una "relativa eficacia en este paciente", quien, en su opinión, tampoco debe faltar a las consultas que tiene regularmente.
"SE ESTÁ MEJOR EN EL MONTE QUE EN EL PSIQUIÁTRICO"
A este respecto, el acusado ha tomado la palabra al final del juicio para remarcar que no puede dejar la medicación porque, entre otras cosas, cada dos meses le hacen una analítica para comprobarlo. Y ha añadido que "para estar en un psiquiátrico, se está mejor en el monte con las cabras y ovejas".
Durante el juicio, dos policías han confirmado que el acusado subía a la red social Facebook de forma pública los mensajes por los que se le ha juzgado con un nombre igual al suyo y que lo hacía desde un bar donde se conectaba a la red Wifi y al que bajaba "de madrugada, tarde", por lo que siempre le vieron solo.
Ante todo lo escuchado, el fiscal ha solicitado para el acusado libertad vigilada consistente en tratamiento psiquiátrico forzoso durante tres años, pues "hace mucho que no está internado" y "puede tener consecuencias muy contraproducentes".