El ministro ve margen para la desescalada con Rusia pero recalca que "no podemos volver al pasado"
MADRID, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares, ha enmarcado en la normalidad las recientes palabras del Rey Felipe VI sobre Marruecos y su mensaje invitando a avanzar hacia una nueva relación, subrayando que el monarca es "un activo de la proyección exterior de España".
Albares ha sostenido que en ningún momento el Gobierno ha dicho que no iba a "usar al Rey" en la crisis diplomática con Marruecos, surgida a raíz de la acogida en España del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, y que también tiene como trasfondo la negativa a reconocer como marroquí el Sáhara Occidental.
En rueda de prensa desde Washington, donde se encuentra de visita oficial, ha sostenido que "el Rey es un activo de la proyección exterior de España".
En cuanto a sus palabras, ha resaltado que se produjeron en "un marco lo más normal y lo más oportuno" como es la recepción del cuerpo diplomático en el Palacio Real y estuvieron "en perfecta sintonía" con las pronunciadas en agosto por Mohamed VI y la respuesta que dio entonces el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Don Felipe habló por primera vez este lunes sobre la crisis con Marruecos, señalando que ambos gobiernos "han acordado redefinir conjuntamente una relación para el siglo XXI, sobre pilares más fuertes y sólidos". "Ahora, ambas naciones debemos caminar juntas para empezar a materializar ya esta nueva relación", sostuvo.
Por su parte, el monarca alauí expresó su intención de "inaugurar una nueva etapa inédita" en la relación bilateral sustentada en "la confianza, la transparencia, el respeto mutuo y la honra de los compromisos".
Asimismo, el ministro de Exteriores también ha considerado "normal" que los Reyes hayan visitado el stand de Marruecos en FITUR, ya que se trata de "un socio estratégico", al tiempo que ha reconocido que le gustaría que la embajadora marroquí, llamada a consultas en mayo, regresara a Madrid. "Es una decisión que corresponde a Marruecos", ha subrayado.
SÁHARA OCCIDENTAL
Por otra parte, en lo que se refiere al Sáhara Occidental también ha defendido que es "lo normal" que los dos países que forman parte del Grupo de Amigos sobre esta cuestión en la ONU hablen de este tema y acuerden "trabajar" para tratar de dar solución al conflicto.
El ministro ha insistido nuevamente en que se trata de "un conflicto enquistado desde hace décadas y como imperativo moral no podemos permitir que dure más décadas".
También ha reconocido que hay "diferencias" en esta cuestión, puesto que Estados Unidos, con Donald Trump aún en la Casa Blanca, decidió en diciembre de 2020 reconocer como marroquí el Sáhara Occidental, una medida que la nueva Administración de Joe Biden no ha revertido.
"España no dicta la posición de ningún país en ningún conflicto del mundo", ha recalcado, incidiendo en que "España también tiene la suya" lo cual no impide para poder hablar y tratar de "romper el bloqueo" para encontrar una solución. "España ni intenta influir, ni marcar ni revertir la posición de un país soberano", ha insistido.
DIÁLOGO CON RUSIA
Albares también ha hablado de la actual crisis con Rusia por la presencia de tropas en la frontera con Ucrania, uno de los temas que abordó la víspera en su encuentro con el secretario de Estado, Antony Blinken.
El ministro ha insistido en la necesidad de dejar margen a la diplomacia y el diálogo para que puedan actuar. "Es importante que la diplomacia sea quien lidere todas las acciones y que no anticipemos escenarios ni acontecimientos (...) que no queremos aunque tal vez otros los quieran", ha afirmado.
En su opinión, "hay margen para la distensión y la desescalada" pero "para que el diálogo triunfe necesitamos dos partes". Así las cosas, ha dejado claro que "hay cosas que no son aceptables". "No podemos volver al pasado, a las esferas de influencia, a que se viole el Derecho Internacional, la integridad territorial, la soberanía, que se dicte a una organización cuáles son los límites de su membresía", ha recalcado.
Albares ha defendido también la necesidad de no adelantar acontecimientos respecto a cuál sería la respuesta en caso de una invasión rusa. "La situación ya es suficientemente tensa como para añadir futuribles", ha afirmado.
"Para que la respuesta sea efectiva y la disuasión sea efectiva no se puede anunciar" qué se va a hacer, ha añadido, garantizando que tanto la UE como la OTAN están trabajando en ello. En este sentido, ha pedido también no hacer "política ficción" sobre si España podría verse inmersa en un conflicto y con tropas en Ucrania en los próximos meses.
BOICOT A LOS JJOO DE PEKÍN
Por último, Albares ha evitado aclarar si España enviará representación a nivel político a los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín, después de que países europeos como Alemania, Países Bajos y Dinamarca ya hayan adelantado su boicot, igual que Estados Unidos y Reino Unido.
"En temas deportivos me gusta que el foco esté en los deportistas, personas que se han entrenado muy duramente durante cuatro años", ha respondido. "No pongamos a los deportistas un foco político que no les corresponde", ha añadido.
"No hay una decisión tomada al respecto, pero espero que en los Juegos Olímpicos se hable sobre todo de deporte", ha remachado.