MADRID, 17 May. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Sanidad en funciones y presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, confía en que el Tribunal de Cuentas revoque la sanción que le ha impuesto por una decisión tomada durante su mandato como alcalde de Vitoria, porque considera que actuó "con arreglo al interés general", de manera que la sanción "no tiene fundamento".
El Tribunal de Cuentas ha condenado a Alonso y a Javier Maroto --hoy vicesecretario Sectorial del PP y en el momento de los hechos concejal de Hacienda en Vitoria-- por causar un perjuicio económico de 393.000 euros a las arcas públicas al firmar un contrato público con un empresario a un precio considerado muy superior al de mercado.
En una entrevista en RNE, recogida por Europa Press, Alonso ha explicado que aún no ha recurrido, pero "naturalmente" lo hará. Además, ha precisado que no le ha sorprendido la decisión del Tribunal de Cuentas, porque la ha adoptado la misma instancia responsable de la instrucción del caso. Ahora, espera que la siguiente instancia les dé la razón, porque está convencido de que la tienen.
NO ES UN CASO DE CORRUPCIÓN
En todo caso, ha subrayado que, aunque es evidente que el Tribunal de Cuentas lo considera un asunto "gravoso", se trata de "una cuestión meramente administrativa", no de corrupción, y que ni siquiera el PNV y el PSE, que fueron quienes denunciaron el caso, lo califican así.
De hecho, ha recalcado que el asunto fue remitido a la Fiscalía --como hace el Tribunal de Cuentas si aprecia indicios de delito-- y ésta lo archivó porque no vio indicios penales.
Por eso, ha lamentado que se quiere "jugar a una especie de confusión". A su modo de ver, el PNV quiere usarlo políticamente porque "tiene serios problemas en caso de corrupción".