Álvarez de Toledo insta a Borrell a apoyar "sin fisuras" a Leopoldo López porque su activismo es "democrático"

Pide "un último empujón" de la comunidad internacional y avisa de que abrir diálogos con plazos de tres meses es "erosionar la presión"

MADRID, 3 May. (EUROPA PRESS) -

La diputada electa del PP por Barcelona, Cayetana Álvarez de Toledo, ha instado este viernes al ministro de Exteriores en funciones, Josep Borrell, a apoyar "sin fisuras" a Leopoldo López, acogido desde el martes en la residencia del embajador español en Caracas, en lugar de anunciar que limitará sus actividades.

En declaraciones a Europa Press, Álvarez de Toledo ha recalcado que lo que hace López no es "activismo político", sino "el más esencial y admirable, fundamental y necesario activismo democrático", así que el Gobierno español debe "apoyarlo sin fisuras, con toda convicción y energía, sin matices ni muecas cursis ni condiciones".

Álvarez de Toledo ha recordado además al Gobierno español que López fue liberado el pasado martes por decisión del presidente constitucional del país, Juan Guaidó, al que el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha dado apoyo.

Y además, ha recalcado que "cualquier democracia tiene que tener una posición de defensa de la democracia por obligación política y moral, sin condiciones y sin juegos tácticos", porque los tacticismos benefician a quienes se aprovechan de ellos. Es lo que ha pasado, ha dicho, con las "operaciones diálogo" del expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero y sus adláteres.

La diputada, que tiene buena relación personal con López y su esposa, Lilian Tintori, ha dicho tener un "optimismo fundado" en que regrese la democracia a Venezuela, por el "profundo, comprensible y lógico hartazgo de la sociedad venezolana" y por que se está "resquebrajando el estamento más duro" de la dictadura, el militar. Los militares "también tienen hijos que pasan hambre y hay gente comprometida con la democracia, pero también hay mucho miedo", ha resumido.

"MÁXIMA PRESIÓN" AL RÉGIMEN Y SUS JERARCAS

Lo que falta, a su juicio, es "un último empujón de la comunidad internacional", que debe defender la democracia con contundencia y aplicar "máxima presión" al régimen y a sus "jerarcas". Se trata, ha dicho, de quebrar al "núcleo duro" que cifra en "no más de 15 o 20, la mayoría hasta las cejas de corrupción y narcotráfico". "No más de 15 o 20; el resto, cuando Maduro aparece rodeado de militares, son fanfarria", ha remarcado.

Álvarez de Toledo ha mirado fundamentalmente a Europa porque, a su modo de ver, los países europeos no deberían admitir para Venezuela lo que no permitirían para sus vecinos. al permitirlo, ha opinado, hay países europeos que están mostrando "una condescendencia que raya en el racismo".

"Los que tenemos que estar a la altura somos los demócratas de fuera", ha insistido, y ha situado como referente al secretario geneal de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro. La diputada ha advertido de que el régimen "siempre ha jugado con el tiempo" y ha habido "tontos útiles" que le han dado "oxígeno" por la vía de darle tiempo.

Y es que, según su análisis, tan importante es lo que debe hacer la comunidad internacional como lo que no debe hacer, que es "abrirle vías de escape al régimen". En su opinión, abrir vías de diálogo con plazos de tres meses --como ha hecho el grupo de contacto impulsado por España en la UE-- lo que hace es "erosionar la presión".

"A PODEMOS SE LE DEBERÍA CAER LA CARA DE VERGÜENZA"

Álvarez de Toledo ha criticado a quienes hablan de "dos bandos" en Venezuela, porque "no son equiparables, ni en su tamaño ni en su condición moral". "Lo que hay es un régimen siniestro, totalitario y terminal", ha añadido, y un "85 por ciento de la sociedad quiere desesperadamente el fin de la dictadura, de la represión, del hambre y e la violencia".

Además, ha dicho que a Podemos "se le debería caer la cara vergüenza" cuando "se rasgan las vestiduras y hablan de golpe de Estado", porque ellos "son los que más activamente han apoyado la dictadura" y porque lo que comenzó el día 30 no es un golpe de Estado sino "la restitución de la democracia que es lo que el pueblo venezolano pide masivamente". Los venezolanos, ha subrayado, no están reclamando un gobierno u otro, sino poder votar a su Gobierno.