La AN da acceso al diputado de la CUP Xavier Pellicer a la 'operación Judas', donde habría sido investigado con Pegasus

La Sala de lo Penal considera que tiene derecho a conocer las actuaciones "siempre que haya sido objeto de investigación" en las mismas

MADRID, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha acordado dar acceso al portavoz del colectivo independentista Alerta Solidaria y diputado de la CUP en el Parlament, Xavier Pellicer, a las diligencias de la 'operación Judas', en las que supuestamente habría sido objeto de investigación con medidas como intervenciones telefónicas y aplicaciones de mensajería con el software Pegasus.

En un auto de este lunes, recogido por Europa Press, la Sección Segunda estima el recurso presentado por la representación de Pellicer contra la decisión del titular del Juzgado Central de Instrucción Número 6, Manuel García Castellón, que denegó su acceso a las actuaciones de la investigación.

A través de un comunicado, Alerta Solidaria ha celebrado que la Sala de lo Penal haya "dado la razón al independentista" y le haya reconocido "el derecho a acceder a las diligencias" en las que se le habría investigado "a él y a 37 independentistas más" con el citado programa.

"El derecho de acceso del investigado a las diligencias que le afectan está reconocido en la ley de enjuiciamiento criminal española, y también por la normativa de referencia europea de derechos humanos, en relación con el derecho a un proceso justo", han señalado desde el colectivo.

SEGUNDA DECISIÓN EN EL MISMO SENTIDO

En este contexto, Alerta Solidaria ha criticado al juez instructor asegurando que "conoce bien esta normativa aunque sólo sea porque la han tenido que corregir hasta 15 veces, durante el último año y medio, por la misma actitud obstruccionista" que, a su juicio, mantiene.

Así las cosas, el colectivo recuerda que la Sala de lo Penal ya acordó el pasado mes de febrero dar acceso a Pellicer a la causa por la que se procesaron a 12 miembros de los Comités de Defensa de la República por pertenencia a organización terrorista.

En ese auto, la Sección Segunda de la Sala de lo Penal recordaba que Pellicer pidió personarse al haber sido objeto de investigación "con medidas (...) como intervenciones telefónicas, de datos y de llamadas recibidas y emitidas por telegram, whatsapp u otras de mensajería" sin que hasta la fecha se le hubiese dado cuenta de su existencia.

En el caso concreto, añadía la Sala, no se podía perder de vista "el derecho del recurrente a conocer el contenido de las diligencias ahora sobreseídas por el hecho de que de las mismas se derivaron las diligencias 99/18 en las que actualmente está siendo investigado junto con otras personas".

Apuntaba que sobre este extremo debía "afirmarse el interés legítimo del recurrente de conocer su contenido sobre la base de su derecho a la defensa, pues de ahí precisamente se originó la actual causa penal que se dirige frente al mismo".

Ahora, la Sala incide en que esas consideraciones aplicadas a su último recurso "han de conducir a la estimación del mismo, acordando el derecho de personación del recurrente y su acceso a las actuaciones de las diligencias previas, siempre que Xavier Pellicer haya sido objeto de investigación con medidas" en las mismas.

SOBRE EL USO DE PEGASUS

Cabe recordar que los guardias civiles que participaron en las pesquisas de la 'operación Judas' declararon el pasado mes de junio ante el juez García Castellón que no les constaban que en las indagaciones se usaran sistemas de investigación como Pegasus.

En esas declaraciones las defensas se interesaron por el posible uso del citado software en el 'caso CDR', pero los agentes señalaron que para las interceptaciones telefónicas se empleó el programa informático Sitel.

Las defensas buscaban averiguar cuál fue el punto de partida que dio lugar a una causa en la que, además de la 'operación Judas', se investigarían otros hechos, como el papel que habría jugado la plataforma independentista Tsunami Democrtic en los disturbios que siguieron a las condenas por el 'procés' en el otoño de 2019, un extremo que sigue bajo secreto.