MADRID, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Podemos en el Parlamento Europeo y uno de los líderes de los anticapitalistas, Miguel Urbán, ha vuelto a rechazar este lunes la posible entrada de su partido en el Gobierno de Castilla-La Mancha que dirige el socialista Emiliano García-Page, a pocas horas de que se cierre la consulta en la que los militantes 'morados' decidirán sobre el preacuerdo alcanzando con el PSOE.
De este modo, los anticapitalistas, que representan el sector más a la izquierda de Podemos, apuran las últimas horas de esta votación, que se cierra a las 22.00 horas de este lunes, tratando de convencer a las bases castellanomanchegas de que no permitan que se haga realidad un pacto que, a su juicio, llevará a su formación a "subalternizarse" con el PSOE.
En declaraciones a La Sexta, recogidas por Europa Press, Urbán ha defendido la postura de su corriente, que pasa por lograr acuerdos puntuales con el PSOE a cambio de apoyar los Presupuestos autonómicos pero sin entrar en el Gobierno.
"UN REGALO ENVENENADO"
Según el también secretario de Europa, ese ofrecimiento no supone otra cosa que "un regalo envenenado", ya que convertirá a Podemos en "cómplice" de las políticas del PSOE. "Entrar en un gobierno en minoría lo que hace es subalternizarte y hacerte cómplice de unas políticas que no son las tuyas, porque nuestro proyecto no es el del PSOE, ni el de Page ni el de Pedro Sánchez. Nosotros somos una opción política radicalmente diferente", ha defendido.
Además, ha recordado que tras las autonómicas de 2015, Podemos tomó la decisión de no entrar en Gobiernos junto al PSOE, pero sí facilitar la investidura de presidentes socialistas para evitar que los Ejecutivos regionales cayeran en manos del PP.
Por ello, Urbán ha defendido que la postura que defienden los anticapitalistas y otra "mucha gente" es la "coherente" con los principios con los que nació Podemos, que se propuso en sus inicios "romper con el bipartidismo y el turnismo".
"Creemos que entrar dentro de un Gobierno del PSOE, siendo una minoría, nos va a subalternizar", ha enfatizado, tras señalar que esta postura no impide que también vean "con buenos ojos cuando el PSOE rectifica y cambia sus políticas" para "girar" hacia las posiciones de Podemos, según ha reconocido Urbán.
Asimismo, Urbán ha avisado de que, en su opinión, esa posible entrada en el Gobierno de Castilla-La Mancha no supondrá una mejora en la vida de la gente, en referencia al argumento que ha ofrecido el líder de Podemos, Pablo Iglesias, para justificar su postura favorable a ese preacuerdo. "Mi opinión es que no lo va a hacer y creo que mantener la política que hemos llevado hasta ahora de acuerdos puntuales es mejor, coherente", ha remachado.
Eso sí, el anticapitalista no ha querido entrar a "juzgar" si la postura de su secretario general es coherente o no con los principios de Podemos, y ha señalado que son los inscritos del partido los que tienen la última palabra, a través de la consulta que finaliza la noche de este lunes. "Al final esto no se decide en una mesa de salón sino los inscritos votando", ha apostillado.
"Todavía no hay un acuerdo, hay un ofrecimiento, y los inscritos decidirán hoy. Yo creo que no hay que aceptarlo porque es un regalo envenenado, pero respeto total tanto a los inscritos de Castilla-La Mancha como a todas las opiniones dentro de Podemos. Eso es lo que nos hace diferentes", ha zanjado.
CAMPAÑA POR EL 'NO'
Desde que el líder de Podemos en Castilla-La Mancha, José García-Molina, anunciara hace una semana y media su preacuerdo con García-Page, los anticapitalistas se han volcado en rechazar por todos los medios ese pacto, y pronto comenzaron a hacer campaña por el 'No'.
Este sector se mostró también muy criticó con la fórmula elegida por la dirección autonómica del partido para consultar a los inscritos, utilizando una sola pregunta en la que se ligaba la aprobación de los presupuestos a la entrada en el Gobierno regional.
Entre los anticapitalistas y principales críticos de ese pacto se encuentra, por ejemplo, David Llorente, el otro diputado con el que cuenta el partido morado en las Cortes de Castilla-La Mancha además del secretario general, y quien además trató de disputarle el liderazgo del partido en la Comunidad Autónoma a García-Molina.
Él ha sido uno de los principales promotores en la región de la campaña lanzada por los críticos con el pacto para pedir que la consulta constara de dos preguntas diferenciadas, y también de la campaña 'Podemos Vota NO' para pedir a los inscritos que rechacen el pacto.