Comenzó en Loita Armada Galega, fundó el Exército Guerrilheiro do Povo Galego Ceive y en sus inicios llegó a recibir armamento de parte de ETA
MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
Primero se integró en la Loita Armada Galega (LAR), luego fundó el Exército Guerrilheiro do Povo Galego Ceive (EGPGC) y ahora, con 71 años de edad, formaba parte del entorno de Resistencia Galega. Al menos desde 1980, Antón Arias Curto lleva más de la mitad de su vida impulsando movimientos armados en Galicia lo que le ha supuesto acumular varias detenciones y condenas que suman veinte años de cárcel. Este histórico del terrorismo gallego volvió a ser arrestado este viernes por la Guardia Civil en el marco de otra operación antiterrorista.
Según informan a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista, este veterano, mecánico de profesión, prestaba su último servicio en las filas de Causa Galiza, una plataforma que va más allá de apoyar el independentismo gallego radical u organizar homenajes a terroristas como el que celebraron en recuerdo de dos miembros del EGPGC fallecidos en 1990. Murieron cuando colocaban un artefacto explosivo en una discoteca de Santiago de Compostela en la que también falleció una tercera persona ajena a la banda y hubo casi medio centenar de heridos.
Los expertos de las fuerzas de seguridad comparan Causa Galiza con la desaparecida Ekin, encargada durante décadas en el País Vasco y Navarra del cumplimiento de la ortodoxia de ETA en todas las plataformas que formaban el entorno proetarra. Las fuentes consultadas otorgan a Causa Galiza un papel clave a la hora de ejercer presión social contra los objetivos que marca Resistencia Galega. Para ello tomó el testigo de las disueltas AMI y Agrupación de Montaña Aguas Limpias-AMAL. Causa Galiza había experimentado una gran radicalización en los últimos tiempos.
DE MONFORTE DE LEMOS
Arias Curto, nacido en Monforte de Lemos (Lugo) en 1944, fue detenido ayer junto a otras ocho personas acusado, de nuevo, de integración en banda terrorista, en este caso por Resistencia Galega. Pero el perfil de este veterano es muy diferente de los arrestados en la mayoría de operaciones contra este grupo criminal, habitualmente jóvenes y con escasa experiencia.
El 'mecánico' del terrorismo gallego empezó su andadura cuando apenas era un treintañero. Su primer arresto data de septiembre de 1980 como miembro de la Loita Armada Revolucionaria (LAR), una de las pioneras del movimiento armado gallego, que inició sus atentados en 1978.
Entre las acciones atribuidas a LAR se cuentan la quema de unos camiones en Santiago de Compostela, el robo de una sucursal de la Caja de Ahorros de Orense, artefactos explosivos en carreteras o el intento de asalto a un polvorín en Noya (La Coruña). Por esta primera aproximación a la lucha armada fue condenado a ocho años de cárcel, aunque quedó libre antes de agotar su pena.
SEGUNDA CONDENA
Al poco de salir de prisión, comenzó con los trabajos de fundación de su segunda banda terrorista, el Exército Guerrilheiro do Povo Galego Ceive, que entre sus acciones cuenta con el asesinato de un guardia civil en febrero de 1989. Arias Curto había sido detenido un año antes de aquel atentado mortal, concretamente en mayo de 1988 y no recuperó la libertad hasta 1995. Tampoco llegó a agotar su condena de 12 años.
Su tercera detención este viernes en Vigo en el marco de la 'operación Jaro' apunta a que las distintas detenciones y estancias en prisión no aplacaron a este veterano terrorista, que se llegó a presentar a las elecciones municipales de 1979 en Monforte de Lemos por la lista de Unidade Galega, una coalición formada por el Partido Obreiro Galego, Partido Socialista Galego y Partido Galeguista.
Según las fuentes consultadas, durante sus primeros años como terrorista llegó a recibir armamento de la propia ETA, interesada entonces en apoyar a todos los grupos que buscasen desestabilizar el joven sistema democrático en cualquier parte de España.
A LAS ÓRDENES DE 'TONINHO'
Por su perfil, Arias Curto gozaba de un papel de ascendencia sobre el resto de integrantes del entorno de Resistencia Galega, según sospechan los expertos antiterroristas, que no descartan que tuviese un papel dinamizador o incluso de captación siguiendo las órdenes de Antom García Martos, 'Toninho' al frente del comando central de la banda en la clandestinidad junto a otros dos huidos, uno de ellos su pareja. Se piensa que puedan estar escondidos en algún punto del norte de Portugal.
La última operación desplegada por la Guardia Civil en diferentes localidades gallegas puede ayudar a estrechar el cerco sobre 'Toninho'. El actual líder del terrorismo gallego tiene menos de 50 años, unos 20 años más joven que Arias Curto, quien esta semana ha emprendido por tercera vez un camino conocido.