El PSOE y sus socios denostan el "nauseabundo revisionismo nostálgico" de los de Abascal
MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
La presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha avisado este miércoles de que no va a tolerar que se haga "apología del franquismo" en la Cámara y ha ordenado retirar del Diario de Sesiones los elogios a la dictadura que pronunció el pasado martes el dirigente de Vox Manuel Mariscal.
El diputado de Vox por Toledo aprovechó su intervención en el debate previo a la votación del nuevo presidente de RTVE para señalar que, "gracias a las redes sociales", muchos jóvenes "están descubriendo que la etapa posterior a la Guerra Civil no fue una etapa oscura" como a su juicio "vende" el Gobierno", sino "una etapa de reconstrucción, de progreso y de reconciliación para lograr la unidad nacional".
Armengol ha pedido "disculpas" al hemiciclo porque, pese a estar presidiendo la sesión plenaria en aquel momento, no escuchó esas palabras de Mariscal y ha explicado que después, tras visualizar la grabación, ha llegado a la conclusión de que no son "aceptables" y por eso ha ordenado su retirada. En realidad los comentarios no se eliminarán sino que se pondrán entre corchetes en el Diario de Sesiones con una llamada explicando que fueron censuradas por la Presidencia.
La presidenta ha anunciado su decisión tras el debate de una propuesta de Vox para derogar la Ley de Memoria Democrática. Armengol ha aprovechado para avisar de que, aunque siempre ha aplicado un "criterio generoso" con el ejercicio de la libertad de expresión para enriquecer los debates y en aras del pluralismo político, no va a "admitir" que se haga "apología del franquismo y discursos de odio" en la Cámara.
TERROR, ASESINATOS Y ODIO
"Hago la advertencia a todos los diputadas y diputados de que no pueden hacer apología del franquismo, que fue una dictadura que causó terror, asesinatos y odio en nuestro país y que esta casa está precisamente para garantizar la democracia y los derechos de todas y de todas", ha explicado.
La iniciativa que se debatía era una enmienda de totalidad de Vox a la reforma de la Ley de Asociaciones impulsada por el PSOE para poder disolver asociaciones que hagan apología del franquismo. En lugar esa reforma, los de Santiago Abascal han intentado que el Congreso tramite un texto para derogar la Ley de Memoria Democrática y todas las medidas que se han puesto en marcha bajo su paraguas.
Varios diputados han acusado a Vox de defender abiertamente la dictadura y algunos como Néstor Rego, del Bloque Nacionalista Galego (BNG), y el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, se han referido expresamente a los comentarios de Mariscal. En concreto, Rufián ha pedido a la Mesa de la Cámara que no permita ese tipo de intervenciones.
EL PP, RESPONSABLE
A su juicio, la libertad de expresión puede amparar que se hagan discursos "deleznables" pero es una "anomalía" que se escuchen reivindicaciones "fascistas" cuando hay vigente una Ley de Memoria Democrática y "sigue habiendo 100.000 personas en cunetas" que fueron "asesinadas por los sublevados contra un orden republicano legítimo". "Están envalentonados como nunca y si no ponemos pie en pared nos van a comer. Antes de que gobiernen, porque gobernarán, vamos a intentar ponérselo por lo menos un poco difícil", ha añadido.
Desde Podemos, Martina Velarde ha recalcado que si Vox "puede seguir haciendo apología del franquismo desde los escaños es porque el PP les ha abierto las puertas de los gobiernos". "La historia no les absolverá de lo que le están haciendo a la democracia, a los franquistas no se les discute, se les combate", ha apostillado.
También ha cargado contra el "nauseabunado revisionismo nostálgico" de Vox la socialista Rafaela Romero, que ha definido su enmienda como una "fascistada máxima" y una "franquistada al cuadrado". "Ustedes son odiadores profesionales, odian tanto que odian hasta la memoria de aquellos que fueron ejecutados y humillados por Franco, por eso se la niegan", ha incidido, avisándoles de que "el daño injusto que el franquismo provocó en tantas y tantas víctimas" no es "derogable ni estirpable de la memoria colectiva española"
EL COMODÍN DEL DICTADOR MUERTO
"El problema aquí es que el neofranquismo está entre nosotros con todo descaro", ha protestado Gerardo Pisarello, de Sumar, quien ha preguntado al PP "de qué sirve condenar al franquismo unas horas si luego se acaba gobernando con sus valedores". También Mikel Legarda, del PNV, ha afeado a Vox su defensa del franquismo y su intento de que se olvide a sus víctimas.
Por su parte, la 'popular' María Jesús Moro, cuyo grupo apoyó la tramitación de la reforma de la Ley de Asociaciones, ha reprochado a Vox que vuelva a dar "una bombona de oxígeno" al PSOE para usar "el comodín del dictador muerto" y que use un trámite, a su juicio, inadecuado, para pedir la derogación de la de Memoria Democrática. No obstante, ha recordado el compromiso del presidente de su partido, Alberto Núñez Feijóo, de acabar con esa norma cuando llegue al Gobierno.