La hasta ahora ministra de Justicia, Pilar Llop, traspasa su cartera de Justicia al hasta ahora ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños. - Carlos Luján - Europa Press
Desde el Ministerio aseguran que por razones de aforo no todos los invitados podían estar en la sala, pero sí en el edificio
MADRID, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Judicial Francisco de Vitoria (AJFV) ha afeado al Ministerio de Justicia que no le permitiese el acceso "a ninguno de los representantes de las asociaciones judiciales" al acto de toma de posesión del hasta ahora ministro de Presidencia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, como ministro de Justicia.
Desde la asociación inciden en que en tomas de posesiones anteriores sí se les ha permitido el acceso y que en este caso no ha sido así. Según precisan, el representante de la AJFV Roberto Fernández "ha optado por irse ante esta falta de consideración".
En este sentido, aseguran que Fernández estaba invitado y se identificó en la sala "por si había algún error", pero que aún así no se le permitió entrar.
Fuentes ministeriales indican a Europa Press que desde Justicia han actuado de acuerdo al protocolo y que en la sala en la que tenía lugar el traspaso de cartera entre Pilar Llop y Bolaños tenían prioridad las autoridades del Estado y que, "por razones de aforo", se habilitaron otros salones en el Palacio de Parcent para que la prensa y otros invitados pudieran seguir el acto.
Al margen, Sergio Oliva, portavoz de la AJFV, ha asegurado en un mensaje enviado a la prensa que el nuevo nombramiento de Bolaños les produce "sensaciones contradictorias". "Es cierto que esa unificación con Presidencia puede facilitar en términos de rapidez la ejecutividad de cualquier acuerdo que se pueda alcanzar en el Departamento de Justicia, pero al mismo tiempo que se unifiquen Presidencia, Relaciones con las Cortes y Justicia en un solo Ministerio, no creo que es una imagen que deba proyectarse", ha dicho.
EL ACTO DE BOLAÑOS
Este martes Bolaños ha asumido la cartera de Justicia de manos de Llop y ante la presencia de otros ministros como Fernando Grande-Marlaska y José Manuel Albares. Así, se ha convertido en 'superministro', aunque se trata de una cartera de la que no es del todo ajeno porque durante la pasada legislatura estuvo al frente de las principales negociaciones que afectan a Justicia, como la última tentativa de renovación del CGPJ, la consumada renovación parcial del Tribunal Constitucional (TC) y la ley de amnistía.
El ahora también ministro de Justicia llevará uno de los cargos con más peso del Ejecutivo, hasta el punto de que sus competencias son las propias de un vicepresidente político por la acumulación de poder y el rango de las mismas, aunque formalmente no tenga ese puesto.
Sobre este extremo, Bolaños ha aprovechado su discurso para recordar que aunque este es un "Ministerio inédito en la Administración General", es "muy común en los gobiernos autonómicos".