Azkoitia honra a las víctimas del terrorismo de la localidad en un acto de "convivencia entre diferentes sensibilidades"

Maixabel Lasa dice que "todavía no he echado la toalla" y confía en que el PP y Covite acudan al acto del Gobierno vasco por las víctimas

SAN SEBASTIAN, 28 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Azkoitia homenajeó hoy a las siete víctimas del terrorismo y de la violencia de esta localidad guipuzcoana que fueron asesinadas en los años 80 por ETA, los GAL o los Comandos Anticapitalistas. Según explicó el alcalde azkoitiarra, Asier Aranbarri, este acto demuestra que el pueblo "sabe convivir con diferentes sensibilidades" y que esta "es la única fórmula para poder avanzar conjuntamente de cara al futuro".

El acto tuvo lugar junto al Palacio Intsausti de Azkoitia donde se inauguró el monolito, una obra compuesta de una serie de piedras concatenadas realizada por el artista tolosarra Tomás Ugartemendia. A la sencilla ofrenda floral acudieron, además de Aranbarri, la directora de Atención a las Víctimas del Terrorismo del Gobierno vasco, Maixabel Lasa, así como la viuda de Justino Quindos, Arcadia Izquierdo, y sus hijos Josefina y Pedro Mari, así como de la concejal del PP en esta localidad y viuda de Ramón Baglietto, Pilar Elías.

Las siete víctimas en cuya memoria se erige el monolito son José María Piris Carballo, escolar de 13 años, muerto tras explotar una bomba, Ramón Baglietto, ex miembro de UCD en Azkoitia, José Larrañaga Arenas, jefe local del Movimiento en Gipuzkoa, todos ellos asesinados por ETA; Elio López Camarón (mecánico), Julio Muñoz Grao (empleado municipal) y Justino Quindos López (guardia civil retirado) asesinados en un bar por los Comandos Autónomos Anticapitalistas y Ramón Oñederra Bergara, asesinado por los GAL.

Aranbarri recordó que este reconocimiento se realiza a "víctimas de diferentes sensibilidades". A su juicio, "a día de hoy en política los gestos son muy importantes y este ha sido un gesto en el sentido de abrir los canales de comunicación entre las diferentes sensibilidades para que podamos hacer un futuro en común".

"TARDE, PERO BIEN"

Pedro Mari Quindos, hijo del guardia civil Justino Quindos, agradeció al alcalde la celebración de un acto que "aunque tarde, pero que al final ha llegado". "Cada cosa tiene su tiempo. Me hubiese gustado que hubiera sido hace 26 o 27 años pero ha llegado en este momento y nunca es tarde si la dicha es buena. Antes no estaba, ahora está hecho", destacó.

Así, manifestó estar "contento, no solamente por esto sino por lo que están haciendo en el pueblo". Asimismo, preguntado por la convivencia entre todas las sensibilidades en Azkoitia, localidad que el pasado año sufrió momentos de tensión como consecuencia de la apertura de una cristalería por parte de uno de los asesinos de Baglietto en el mismo edificio donde reside su viuda Pilar Elías, Quindos señaló que "todo es posible".

"Yo trato con todas las personas del pueblo, sean de HB, del PSOE, del PNV, sean del partido que sean y creo que todos tienen aprecio conmigo" afirmó para añadir que no tiene "rencor con ninguno, solamente pena". Además, reconoció que "de política hablo poco porque no quiero" y aseveró que "personalmente" no se ha sentido olvidado "porque he tenido mucha gente que siempre me ha hecho recordar cosas de entonces".

Por su parte, Maixabel Lasa definió esta iniciativa como "una forma de saldar la deuda histórica que tanto las instituciones y los ciudadanos tienen con las víctimas del terrorismo" y fundamentalmente con las de "los años difíciles". En ese sentido, destacó la "casualidad" de que todas las víctimas de Azkoitia son de los años 80.

OLVIDADAS

De este modo, destacó que "son ellas las que han sido más olvidadas, ninguneadas y desconocidas". Además, enmarcó el acto de homenaje dentro de los que se están haciendo en los pueblos de los tres territorios históricos. "Hay previstos varios de aquí antes de las elecciones y después también se seguirán haciendo este tipo de homenajes. Pienso que es lo que se debe hacer", subrayó.

Por otro lado, preguntada por la decisión de PP y Covite de no acudir al acto en recuerdo a las víctimas convocado por la dirección de Atención a las Víctimas del terrorismo del Gobierno vasco para el día 22, aseguró que "todavía no he echado la toalla" y que mantiene "la esperanza de que estén al final".

"Nosotros vamos a intentar por todos los medios aclarar todas las dudas y todos los recelos que pueda haber por medio y lo vamos a intentar hasta el final", afirmó al tiempo que anunció que han mantenido contacto con ellos y que les han pedido otra reunión para el próximo lunes.