MADRID, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
El juez inhabilitado Baltasar Garzón ha dicho este viernes respetar la querella presentada contra él por el 'número dos' de la trama Gürtel, Pablo Crespo, condenado a 37 años y medio de prisión por la primera época de actividades de la trama corrupta, aunque ha enfatizado que la grabación filtrada de una conversación que mantuvo el comisario jubilado José Manuel Villarejo en 2009 es "a todas luces ilegal".
Un juez de Madrid ha admitido a trámite la querella presentada contra el que fuera juez del caso Gürtel por una "confabulación extraprocesal" con el excomisario jubilado José Manuel Villarejo para preparar la operación contra el entramado corrupto encabezado por Francisco Correa y "perjudicar al Partido Popular".
"Me preocupa mucho que una grabación que a todas luces es ilegal sirva de base para la admisión siquiera inicialmente de una querella, máxime cuando esa grabación está denunciada en otro juzgado de Plaza de Castilla por mí mismo y está admitido la investigación como presuntamente delictiva la grabación en sí", ha defendido Baltasar Garzón.
En declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, el juez inhabilitado ha dicho que "está bien" que el magistrado de Plaza de Castilla haya pedido al decanato de la Audiencia Nacional que remita testimonio de las normas de reparto de los Juzgados Centrales de Instrucción en el año 2008 pero "quizá lo que no está tan bien es que se diga y ya se impute un hecho de prevaricación".
Según la querella, Garzón asumió "de forma totalmente injusta, tanto en una dimensión formal (por vulnerar las normas de reparto de la Audiencia Nacional), como material (por instruir una causa que había sido previamente confeccionada para él)".
"Si se llega a dar el paso siguiente, entonces será el momento que yo me pueda pronunciar con más contundencia por algo que creo que está fuera de todo lugar porque no olvidemos que la base es una grabación ilegal", ha reiterado el Garzón, que ha pedido que se moderen "esos ataques" hacia su persona porque "estamos en un país libre, democrático" y donde "hay libertad de expresión.
En esta línea, ha subrayado que "hay que tener mucho cuidado con el daño que se le hace a las personas" con este tipo de acusaciones. "Las investigaciones judiciales son para mí muy serias y lo van a seguir siendo hasta el final de mis días, veo que para otros no. Las filtraciones interesadas al final nos perjudican a todos, no personalmente sino a la credibilidad del sistema judicial", ha explicado.
Finalmente, ha reafirmado que la querella no saldrá adelante. "El querellante ha considerado que tenía que formular la querella y me parece muy bien, me parece respetable y ahora veremos si lleva razón o no. Ahora sí, cuando se diga que no lleva razón también habrá que responder", ha concluido.