MADRID, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -
La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha reivindicado este jueves desde Eslovenia la unidad de los Estados miembros de la Unión Europea (UE) ante crisis como la pandemia de la COVID-19 o la guerra de Ucrania, asegurando que "cuando en Europa ha actuado unida, jamás se ha arrepentido".
Batet se ha desplazado este jueves a Eslovenia para intensificar las relaciones parlamentarias e institucionales entre Madrid y Liubliana y en el marco de los contactos preparatorios de la próxima Presidencia española del Consejo de la UE.
En la que es la primera visita de la máxima autoridad del Congreso al país balcánico en los treinta años de relaciones diplomáticas, Batet se ha reunido con su homóloga eslovena, Ursa Klakocar Zupancic, y los líderes de los grupos parlamentarios y miembros de las comisiones de Política Exterior y de Asuntos de la UE de la Asamblea Nacional eslovena.
Según ha detallado el Congreso en un comunicado, Batet ha abordado con todos ellos la situación que vive Europa y las prioridades de la futura Presidencia española del Consejo de la UE, que asumirá en el segundo semestre de 2023.
La presidenta ha explicado que España busca profundizar en las políticas europeas que se han mostrado "muy eficaces" ante las crisis de la COVID-19, la guerra de Ucrania y la seguridad energética. "Cuando en Europa hemos actuado unidos, nunca nos hemos arrepentido", ha dicho.
DESAFÍOS COMUNES
El viaje de Batet tiene lugar tras el reciente viaje del presidente, Pedro Sánchez, al país balcánico, y allí la presidenta del Congreso ha constatado las "excelentes relaciones" bilaterales entre Madrid y Liubliana, "dos países profundamente europeístas, con vocación atlantista --ambos están en la OTAN-- y unidos por el nexo mediterráneo". "Por tanto, son muchos los lazos y los interese que nos unen", ha apostillado.
Con el ánimo de intensificar estas relaciones, Batet ha propuesto a la presidenta de la Asamblea Nacional eslovena la celebración en Madrid del I Foro Parlamentario Hispano-Esloveno para "estrechar lazos entre los representantes de la ciudadanía de ambos países y tratar intereses compartidos y desafíos comunes", entre los que figuran el turismo, la sanidad, el cambio climático, la cooperación mediterránea o la seguridad energética y alimentaria.