MADRID, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, Carmen Calvo, se ha ratificado este martes en que el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, se comprometió a intentar que el dictador Francisco Franco no sea enterrado en la catedral de La Almudena.
"Le dije que teníamos que ponernos de acuerdo para encontrar una vía decorosa y más discreta y privada y él me dijo: 'Ciertamente, este asunto nos aboca a que podamos trabajar de una forma adecuada'", ha explicado Calvo en una entrevista en la Cadena Ser, recogida por Europa Press.
Las explicaciones de la vicepresidenta llegan después de que el portavoz del Vaticano, Greg Burke, haya precisado en un comunicado que Parolin, en su encuentro con Calvo este lunes, no se pronunciase "en ningún momento sobre el lugar de la inhumación" del dictador.
Calvo había anunciado previamente un acuerdo entre el Ejecutivo y la Iglesia para "encontrar una salida" a una situación que, "obviamente" no puede pasar por que los restos del dictador acaben la cripta de la catedral madrileña.
"Ni nosotros ni el Vaticano pueden impedir que Franco sea inhumado en la Almudena: la decisión es de sus familiares. Dicho esto, si los restos van a un lugar donde se enaltece al dictador... eso no es posible, legal ni factible", ha insistido.
En este sentido, Calvo ha asegurado que el comunicado del Vaticano "es correcto" pero ha advertido: "Si los restos acaban en La Almudena la Iglesia tendrá que resolver esta situación, desconozco cómo".
"LE DIJE LITERAL QUE LA IGLESIA IBA A TENER QUE PAGAR EL IBI"
Por otro lado, Calvo también se ha referido a otro de los temas tratados en su encuentro con Parolin, el relativo a los impuestos que paga la Iglesia. El Gobierno defiende que la Conferencia Episcopal española acepte la fórmula que se aplica en Italia desde 2012, de forma que sea eximida de algunos impuestos, pero tribute por "aquellos inmuebles o actividades en las que no se produce culto".
"Le dije literal que la Iglesia en España iba a tener que pagar el IBI", ha asegurado Calvo, que ve "razonable" y "justo" la colaboración de la institución para el pago por aquellos edificios que no están dedicados a actividades religiosas.
"Le propuse crear un grupo de trabajo que pudiera trabajar en esta dirección para cuando la lista de bienes inmatriculados definitiva se publique. Encontré una respuesta positiva y le dije que estaba siendo un tema polémico en España", ha señalado la vicepresidenta.