MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, ha rechazado este martes hacer caso de los resultados que las encuestas le otorgan a su partido para las elecciones generales del 28 de abril, aunque ha reconocido que la crisis, la corrupción y la gestión del conflicto catalán han lastrado a su partido.
En una entrevista en 'El Hormiguero' de Antena 3, recogida por Europa Press, el líder de los 'populares' ha recordado que las encuestas en los años 2015 y 2016 "daban a cuatro partidos" empatados y que fue el PP quien finalmente logró hacerse con la victoria electoral.
Eso sí, ha apuntado a "las tres 'ces'" --crisis económica, corrupción y Cataluña-- como los motivos por los cuales el PP ha visto mermada su capacidad en el Congreso de los Diputados en el último lustro.
"El par de sinvergüenzas que han traicionado al partido", ha lamentado, en referencia a los escándalos en los que se han visto involucrados diferentes dirigentes del PP. "Al final en un partido somos cientos de miles de personas. Hay que mandar un mensaje de tranquilidad: la persona con sorpresa está en los tribunales", ha apuntado.
SE ANIMA CON EL BAJO Y SE CONFIESA "MUY FAN DEL REY"
Casado se ha sometido a las preguntas de Pablo Motos y de 'Trancas y Barrancas' después de que Pablo Iglesias y Albert Rivera hicieran lo propio la semana pasada. La entrevista ha comenzado con la familia del presidente del PP como protagonista.
El dirigente les dijo a sus hijos que la razón por la que aparece tanto en televisión es porque está "en un concurso". "Cuando me ven en un mítin me dicen que por qué grito tanto. Es para que entiendan por qué estoy menos en casa, pero que entiendan que si gano el concurso les compro un perro", ha asegurado.
Antes de ser cuestionado sobre el proceso independentista, las pensiones o el aborto, Casado ha hecho entrega a Motos de una caja de tomates cherry recién traídos de una cooperativa almeriense y ha querido acordarse de la celebración del Día Mundial del Autismo.
Tras las presentaciones, Casado se ha referido a sus contrincantes electorales y ha confesado que no reconoce "enemigos ni dentro ni fuera de la política". En este sentido, ha explicado que mantiene buena relación personal con Iglesias, Rivera y con Pedro Sánchez y Santiago Abascal.
"Estamos en las antípodas, pero la gente lo que peor lleva es que estemos todo el día pegándonos. Es lo que suele salir en los telediarios", ha apuntado, para después explicar que ha coincidido "con todos ellos en muchas tertulias".
NI AZNAR NI RAJOY: SU REFERENCIA ES ADOLFO SUÁREZ
El desde hace ocho meses presidente de los 'populares' fue durante otros ocho años presidente de las Nuevas Generaciones del partido en la Comunidad del Madrid. Pese a pasar dos años como director de gabinete del expresidente José María Aznar y cinco como vicesecretario de Comunicación con Mariano Rajoy, Casado ha reconocido que su referente político no es ninguno de los dos.
"Soy diputado por Ávila, Adolfo Suárez es mi referencia. Es esa audacia, esa prudencia que vemos como una referencia lejana", ha reconocido, para después ensalzar el legado de los dos expresidentes de su partido.
Coincidiendo con sus inicios en el partido, Casado estudiaba para finalmente titularse como licenciado en Derecho. Con todo, el líder 'popular' cree que hay ciertos encargos que no podría llevar a cabo, como ser abogado defensor del exvicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras.
"El turno de oficio no esta pagado. No se cómo funciona eso. Imagino que puedes rechazar algún caso", ha aseverado, para después opinar que su caso particular "es bastante indenfendible". "Aun así creo que merece una defensa, pero que sean conscientes de que la ley está para cumplirse", ha apostillado.
Por último, Casado ha abandonado la mesa de la entrevista y se ha enfundado el bajo para interpretar el tema de Mark Ronson y Bruno Mars 'Uptown Funk'. Consciente de su actuación, el presidente del PP ha agradecido el trato recibido y ha zanjado: "Espero que me vaya mejor que tocando el bajo".