MADRID, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
El líder de Izquierda Unida y portavoz del grupo parlamentario La Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), Cayo Lara, ha avisado este miércoles a los partidos que apoyan la sucesión del rey Juan Carlos en su hijo, el futuro Felipe VI, de que los ciudadanos se lo harán pagar en las urnas en la próxima cita electoral por negarse a "dar la voz a la ciudadanía" en un referéndum sobre el modelo de Estado.
Durante el debate de la Ley de Abdicación en el Congreso, Lara, adornado con una escarapela republicana igual que los demás diputados de su grupo parlamentario, ha censurado que el Príncipe de Asturias vaya a heredar la Jefatura del Estado "como si fuera una propiedad privada" y ha calificado el proceso de abdicación como "una maniobra oscura" y "palaciega".
Por ello, ha defendido la necesidad de convocar un referéndum para elegir entre monarquía o república y ha preguntado a quienes se oponen a esta consulta "por qué temen" que los ciudadanos se expresen en las urnas. "Queremos que se convoque un referéndum y se pregunte al pueblo español qué quiere en estos momentos cruciales historia. Hablamos de monarquía o democracia", ha resumido.
El líder de IU ha subrayado que España se encuentra en un momento "histórico" ante el que "nadie puede permanecer inerte" y ha pedido la apertura de un nuevo proceso constituyente que abra un debate "hacia un nuevo proyecto de país", en el que tiene "especial trascendencia" la forma de Estado. "Sería mucho más democrático consultar al pueblo sobre este punto que no hacerlo", ha sostenido.
Lara considera que esto permitiría a España "subir un peldaño más en la escala democrática" y ha rechazado la visión "paternalista" de la democracia y el "desprecio absoluto" al pueblo que, a su juicio, supone negarle el derecho a decidir.
NADIE PODRÁ PARAR LOS DESEOS DE LA SOCIEDAD
En este punto, ha advertido de que dar soporte a la monarquía, una institución "anacrónica e injusta", tendrá un coste en el futuro. "No falta mucho para que las urnas vuelvan a hablar", ha recordado tras aludir a los resultados de las pasadas elecciones europeas y advertir de que "nadie podrá parar los deseos de la sociedad para decir alto y claro qué quiere". Cayo Lara ha sostenido que las próximas elecciones serán "un plebiscito" en el que el actual sistema "será puesto a prueba".
Así, ha insistido en que el pueblo es "el único soberano" y ha pedido a los partidos políticos que "no cierren una herida que está infectada". A su juicio, se está "endulzando la maniobra" para presentar "como regeneración del sistema" la sucesión de una "dinastía decrépita".
El portavoz de Izquierda Plural se ha erigido como la voz de la gente que dio su vida o tuvo que exiliar por la defensa de una república democrática y también ha aludido a las "renuncias" de la Transición que llevaron a aceptar la monarquía "para que la democracia saliera adelante". "Por esa historia y por esas renuncias tenemos la legitimidad para exigir que se convoque un referéndum para que el pueblo elija su destino", ha reivindicado.
Cayo Lara ha enmarcado esta decisión en un sistema "despótico" que se está escribiendo "con el sufrimiento de mucha gente" y en el que se ha abierto "un abismo" entre una parte de la ciudadanía y las instituciones, con el pacto constitucional de 1978 "roto".
Ha subrayado que los derechos pactados de la Transición "se violan masivamente", se desahucia a gente de sus viviendas, se recorta la ayuda a los desempleados, crece la desigualdad social y la corrupción "se generaliza" llegando a todas las instituciones del Estado, incluida la Familia Real.
SE PUEDE, PERO NO SE QUIERE
Según ha apuntado, la monarquía llega a este punto con el nivel de apoyo ciudadano "más bajo" y es hora de "la democracia con mayúsculas", algo que considera que no afecta a la estabilidad del país. "¿Estabilidad para quién? --ha preguntado--. ¿Para las grandes fortunas?, ¿la Bolsa y el Ibex35?".
Pero además, ha recordado que para convocar un referéndum no haría falta modificar la Constitución, como ya se hizo en la votación sobre la entrada en la OTAN o la de la Constitución europea. "Sí se puede, pero no se quiere", ha remarcado.
Ha recordado que ya tuvo oportunidad de trasladar esta idea al propio Don Juan Carlos en su primera visita al Palacio de la Zarzuela en agosto de 2009 y se ha preguntado por qué se ha decidido que lo acordado en 1978 tiene que ser "definitivo y para siempre".
Lara cree que "no se puede esperar más" y ha insistido en que el pasado 25 de mayo, en las elecciones al Parlamento Europeo, quedó claro que los ciudadanos "han cambiado de opinión" y han demostrado estar "hartos" del bipartidismo y un sistema "golpeado por la corrupción en todos sus niveles".