MADRID, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
El coordinador federal de IU, Cayo Lara, se ha mostrado este lunes partidario de modificar la Constitución si es necesario para facilitar la celebración de una consulta legal en Cataluña, ya que considera que impedirla sólo provocaría una "polarización" de posiciones que no arreglará la situación.
Preguntado por los mecanismos que permitirían consultar a los catalanes, Lara ha recordado en rueda de prensa que la Constitución fue reformada "en dos siestas" en 2011 con acuerdo de PSOE y PP para introducir el concepto de estabilidad presupuestaria, por lo que ahora podría hacerse lo mismo si se quiere facilitar este mecanismo.
Eso sí, Lara ha dejado claro que consulta no es sinónimo de "independentismo" y ha subrayado que en caso de su celebración IU defendería un Estado federal en el que Cataluña tuviese "encaje" dentro del Estado español.
INTELIGENCIA, DIÁLOGO Y NEGOCIACIÓN
En este punto, se ha preguntado qué sucedería si el Gobierno se mantiene firme en rechazar un referéndum y pese a ello la Generalitat decide seguir adelante y celebrarlo. "¿Qué hacemos entonces?, ¿lo impediría el Gobierno por la fuerza?", ha preguntado insistiendo en que esta postura sólo lleva a una polarización de posiciones.
El líder de IU ha abogado así por utilizar "la inteligencia, el diálogo y la negociación" porque todas las partes tienen que "convivir" y "entenderse dentro del Estado". "Lo contrario no conduce a ninguna parte", ha insistido Cayo Lara, que ha reiterado que las posiciones "enconadas" sólo "agudizan más el proceso".
"Mejor hacemos una consulta legal que intentar forzar la maquinaria", ha enfatizado avisando de que el actual enfrentamiento genera que cada vez haya más posiciones independentistas.
EL PROBLEMA DE ESPAÑA NO SON LAS BANDERAS
Sin embargo, Lara ha defendido que el problema de Cataluña "no son las banderas" sino los "problemas sociales", y ha acusado a CiU de "corresponsable" junto a PSOE y PP de los "recortes" y las "políticas neoliberales" aplicadas en España.
Según ha apuntado, estas políticas han provocado además que "se vacíe la hacienda pública", lo que a la vez tiene como consecuencia que el Estado tenga menos dinero que transferir a las comunidades autónomas. Así, ha identificado a CiU y al presidente catalán, Artur Mas, con "copago, recortes y corrupción" y ha calificado de "falacia" que todos los problemas de Cataluña se resolverían independizándose de España.