Vuelve a pedir la abstención de PP y Cs para no depender del independentismo y anima a Podemos a restablecer la confianza
MADRID, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del Gobierno en funciones, Isabel Celaá, ha defendido este viernes que el hecho de no querer un gobierno que dependa del independentismo no quiere decir que no se pueda hablar con las fuerzas nacionalistas catalanas de cara a la investidura, si bien ha sugerido que esas conversaciones no las llevará a cabo personalmente el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Celaá ha señalado que el propio Sánchez, en su comparecencia pública del pasado miércoles tras su encuentro con el Rey, señaló que su intención es reunirse personalmente con los líderes de Unidas Podemos, del PP y de Ciudadanos si Albert Rivera "tiene a bien".
"Eso no quiere decir que no se hable con el PNV o con las fuerzas nacionalistas catalanas, como hizo en su caso la señora (Adriana) Lastra", ha dicho, recordando que para la investidura fallida fue la portavoz parlamentaria socialista socialista quien vio a sus homólogos de ERC, Gabriel Rufián, y de Junts, Laura Borrs.
Fuentes gubernamentales apuestan por que el esquema de reuniones y contactos será similar al de junio y julio aunque, como ha dicho Celaá, todo está por hacer y ya se irá "describiendo con más precisión". Por lo pronto, Sánchez se ha reunido personalmente con Compromís y fuentes socialistas avanzaron una reunión entre el presidente en funciones y el líder del PNV a partir del 19 de agosto en Bilbao.
En todo caso, Celaá ha insistido en que, para que el Gobierno no dependa de los independentistas, "el presidente sigue pidiendo la abstención del PP y de Ciudadanos".
EL GOBIERNO DE COALICIÓN SIGUE DESCARTADO
Por otro lado, a reconocido la necesidad de "recuperar la confianza" con Unidas Podemos después de la investidura fallida de Pedro Sánchez el pasado mes de julio, aunque ha mantenido su negativa a formar un Gobierno de coalición y ha insistido en que se deben explorar otras "fórmulas", como un acuerdo de investidura o un pacto de legislatura.
Para ello, ha explicado que el objetivo de los socialistas es elaborar un programa "abierto" que intentará pactar con sus posibles socios, PNV, PRC y "lógicamente" Unidas Podemos. "Queremos un Gobierno ya, cuanto antes, que no haya duda en esto", ha asegurado antes de apuntar que posiblemente en otoño haya cuestiones "más difíciles y más delicadas" que atender.
En este sentido, ha animado a todos los partidos a "arrimar el hombro" para evitar la repetición electoral, unos llegando a un acuerdo y otros (PP y Cs) no bloqueando la investidura de la única alternativa posible. "No se trata de regalarle a Sánchez la investidura sino de que España tenga lo que necesita", ha remachado.
A su juicio, los llamamientos que han surgido desde estos partidos para que Sánchez se aparte y el PSOE proponga otro candidato son "distracciones y excusas" para no "cumplir con su parte alícuota de responsabilidad para desbloquear.
Según ha dicho, el Gobierno "no puede estar más de acuerdo" con el Rey y sus palabras sobre que lo mejor es encontrar una solución antes de repetir las elecciones, porque la mayoría de los españoles no quiere volver a las urnas.
Y se ha dirigido directamente a Unidas Podemos para recuperar la confianza, aun consciente de su "dificultad". "Ahora toca explorar otras vías, hay otras fórmulas", ha reiterado. Eso sí, ha incidido en que el programa que se elaborará con las aportaciones de la sociedad será "una propuesta abierta" para negociar con los de Pablo Iglesias.
MÁS REUNIONES SOCIALES EN AGOSTO
Se trata, ha dicho, de "sustentar una el proyecto entre los progresistas". En todo caso, ha recordado que Sánchez tiene intención de continuar a finales de agosto las reuniones con la sociedad civil, por las "múltiples peticiones recibidas", así que continuará con un trabajo "intenso".
Fuentes del Ejecutivo auguran un programa de reuniones con la sociedad civil tan intenso como el de esta última semana (14 encuentros con 180 colectivos) y lo previsible es que las reuniones políticas se acerquen más a septiembre. Eso sí, el viernes 16 de agosto no hay Consejo de Ministros así que es ahora cuando Sánchez podrá tomarse unos días de descanso, aunque seguirá habiendo ministros activos.
En cuanto a si el Gobierno está dispuesto a derogar la reforma laboral del PP como piden los sindicatos y a la vez como vía para recuperar la confianza con Podemos, la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, ha señalado que el Gobierno se mantiene en lo que incluyó en su programa electoral: elaboración de un nuevo Estatuto de las personas trabajadoras y derogación "de los aspectos más lesivos" de esa reforma laboral, que no fue posible por la disolución de las Cortes en la anterior legislatura.