El ejercicio de la OTAN Tiger Meet 2016 reúne a unas 1.400 personas durante dos semanas para maniobras de todo tipo
ZARAGOZA, 17 May. (EUROPA PRESS) -
Unas 100 aeronaves y 1.400 miembros de los Ejércitos de 15 naciones participan desde este lunes y durante dos semanas en el ejercicio de la OTAN Tiger Meet 2016, en el que los participantes practican operaciones de todo tipo, un adiestramiento avanzado en el que un total de 24 escuadrones simularán las actuaciones que realizan los Ejércitos del Aire en una situación bélica real.
El coronel José Manuel Cuesta, jefe del Ala 15, del Ejército del Aire ha expuesto que no solo participan países de la OTAN, sino otros ajenos. En la base aérea de Zaragoza se han desplegado aviones y personal de la Alianza Atlántica, España, Bélgica, Grecia, Suiza, República Checa, Francia, Holanda, Polonia, Turquía, Noruega, Reino Unido, Alemania, Hungría e Italia.
Cuesta ha señalado que "el objetivo es hacer las cosas como las haríamos en caso de conflicto real" y que no solo participan cazas, sino helicópteros, otros aviones de apoyo y personal logístico para asegurar el mantenimiento de los aviones y dar servicio a todos los participantes.
"Una gran ventaja es que todos nos desplegamos en una misma base aérea, en un mismo lugar, y en el día a día estamos de 16 a 18 horas juntos". Así, "nos conocemos cara a cara y cuando llegue el momento de tener que ir a un conflicto sabemos con quién vamos a ir y a quién pedirle ayuda o quién está al otro lado del teléfono o de la radio".
Entre las operaciones, el coronel Cuesta ha mencionado las de combate aéreo con cazas, ataque en superficie, defensa aérea, perturbación electromagnética e intervención con helicópteros para hacer rescates de personal, extracción de personal no combatiente e infiltración de medios de operaciones especiales, así como aeroevacuaciones.
Asimismo ha expuesto que "hay que tener milimetrado al segundo o al milímetro quién despega en cada momento, quién viene a aterrizar en cada momento" y que, en general, "la parte de operaciones es complicada". La logística es "imprescindible".
Zaragoza acoge este ejercicio por primera vez. El Ejército de Aire se encarga de proporcionar apoyos logísticos desde el Mando Aéreo General y el Mando Aéreo de Combate y la unidad anfitriona es el Ala 15. Los Ejércitos de las 15 naciones participantes se complementan en forma Tiger, fortaleciendo sus relaciones.
Los pilotos realizan por la mañana las operaciones más sencillas, como combate audiovisual, simulación de rescate de personas o infiltración de personas, llevando a cabo entre 50 y 60 salidas, y por la tarde, operaciones con aviones de ataque y defensa, en las que se registran hasta 70 salidas. El área de vuelo abarca la zona de control de Zaragoza --fuera del casco urbano--, y también Teruel, Albacete y Murcia, así como las Islas Columbretes (Castellón).
No es un ejercicio de la OTAN. Lo dirige el general jefe del Mando Aéreo de Combate y el día a día se organiza como si fuera un caso real, con el diseño de los planes del cuartel general que se convierten en el plan maestro y se difunde a las unidades participantes.
POCO RUIDO
El Ala 15 ha organizado una zona de operaciones y un centro de operaciones que sirve de enlace con el mando y control del Ejército del Aire, a lo que se suma un área con tiendas y contenedores para el mantenimiento.
José Manuel Cuesta ha dejado claro que se ha evitado molestar a los zaragozanos mitigando los ruidos, de forma que no habrá vuelos nocturnos, se utilizará la pista Sur, la más alejada de la capital aragonesa, se ha restringido la velocidad y las alturas de llegada a la Base son "más altas de lo normal".
También ha hecho notar que durante dos semanas unas 1.300 personas están pernoctando en Zaragoza, lo que eleva la ocupación hotelera. A estos se suman 1.600 'spoters', fotógrafos del aire que se han desplazado a Zaragoza para seguir el ejercicio. "En algún sitio viven, en algún sitio han alquilado el vehículo, están conociendo Zaragoza y volverán", ha apuntado.
PUERTAS ABIERTAS
El comandante Arraéz, jefe del Escuadrón de Apoyo y Comunicaciones, y oficial de seguridad en vuelo de la base, ha expuesto que el día 21 se celebrará una jornada de puertas abiertas en estas instalaciones desde las 8.00 hasta las 14.00 horas, con el objetivo de acercar la institución a la ciudadanía, "una oportunidad única para todos aquellos enamorados de la aeronáutica y la vida militar".
Ese día actuarán la patrulla acrobática de paracaidismo del Ejército del Aire, los F18 y los EF-2000 del Ala 15, la patrulla de helicópteros Aspa, un F-16 belga, un Eurofighter y la patrulla Águila, a lo que se suma la participación de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y la Policía Nacional con actividades como una exhibición de perros adiestrados. Se espera que visiten la base unas 50.000 personas.
El público podrá observar muy de cerca las demostraciones de "los mejores del mundo", ha referido Arraéz, quien ha indicado que "hay muchos aficionados a la aviación, muchas personas a las que les apetece entrar a esta base para conocernos, saber cómo funcionamos, cómo trabajamos".