Denuncia el mensaje del Ejecutivo de Urkullu en busca de "una disminución drástica de los efectivos de las Fuerzas de Seguridad del Estado"
MADRID, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la Confederación Española de la Policía (CEP), Antonio Labrado, ha remitido un escrito al director general de la Policía, Ignacio Cosidó, en el que le pide "una postura firme" así como al Ministerio del Interior a la hora de defender a los miembros del Cuerpo frente al "desprestigio" que, a su juicio, sufren por parte del Gobierno vasco del PNV.
"Señor director, le reclamo una postura firme como ya lo ha demostrado durante sus intervenciones en actos oficiales en el País Vasco y Navarra y una actitud proactiva del Ministerio del Interior para que el trabajo que realizan nuestros compañeros en las Jefaturas Superiores reciba apropiada defensa frente a intentos interesados y politizados, además de estériles, de desprestigio", dice la misiva a la que ha tenido acceso Europa Press.
Según dice la CEP, su intención no es "convencer de nada ni demostrar nada". "Pero de nadie estamos dispuestos a recibir lecciones cuando el liderazgo de la seguridad pública lo ejerce, de forma evidente, el Cuerpo Nacional de Policía", zanjan.
El sindicato se basa en una declaraciones efectuadas por el director de la Ertzaintza Gervasio Gabirondo el pasado 16 de junio en el marco de los trabajos que viene realizando en el Parlamento vasco la denominada 'Ponencia para el Estudio de las Competencias de las Administraciones Públicas que actúan en la Comunidad Autónoma Vasca'.
"INTERFERENCIAS" E "INTROMISIONES"
En ese foro, el responsable de la Ertzaintza denunció "interferencias" e "intromisiones" en relación a la labor que desempeña la Policía Nacional y puso como ejemplo las ejecuciones de las órdenes de búsqueda y captura que desarrollan las unidades especializadas de la Policía.
A juicio de la CEP, estas palabras abundan en "el mensaje que el Departamento vasco de Interior del Gobierno vasco lleva meses lanzando en cualquier foro, reclamando una disminución drástica de los efectivos de las Fuerzas de Seguridad del Estado, como antesala de la futura desaparición de las calles de aquella comunidad autónoma".
En ese sentido, este colectivo policial pone la situación en conocimiento de Cosidó y le traslada su "más enérgica condena". Denuncia que se trata de "unas reflexiones despojadas de cualquier argumento técnico o normativo que constituyen un síntoma evidente de que fueron realizadas desde un prisma político alejado del interés policial".
Acusan al Ejecutivo que preside Iñigo Urkullu de "no importarle tanto la calidad de la seguridad de sus ciudadanos, sino el número de Cuerpos que la protegen frente a múltiples amenazas que la criminalidad plantea". Asimismo defiende la profesionalidad de los policías nacionales que se dedican "sólo a trabajar" mientras que "otros parecen emplear su tiempo en la política y en no se sabe bien qué clase de aspiraciones personales o adhesiones al partido de Gobierno".