MADRID 29 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha celebrado este viernes que el Tribunal Constitucional haya declarado nulas por inconstitucionales las tasas judiciales impuestas a las personas jurídicas impulsadas en su momento por el exministro de Justicia Alberto Ruiz-Gallardón.
"El TC tumba las injustas tasas judiciales del gobierno Rajoy a las pequeñas empresas. Buena noticia", ha escrito Rivera en su perfil de Twitter. Según el Constitucional, la elevada cuantía de las tasas que se han estado aplicando a las personas jurídicas (empresas, ONG y partidos políticos) estaban impidiendo el acceso a la Justicia.
Con la reforma que llevó a cabo el actual ministro del ramo, Rafael Catalá, el Gobierno de Mariano Rajoy ya suprimió en febrero de 2015 las tasas para las personas físicas.
También la diputada de C's y secretaria cuarta de la Mesa del Congreso, la abogada Patricia Reyes, ha expresado su satisfacción por la decisión del alto tribunal. Además, ha felicitado a la Brigada Tuitera --que defiende una Justicia "accesible, independiente y con medios"--, al señalar que este movimiento ha trabajado "intensamente durante muchos años" por la eliminación de las tasas.
PROPOSICIÓN DE LEY DE CIUDADANOS
En la anterior legislatura, el pasado 22 de febrero, Ciudadanos presentó en el Congreso una proposición de ley para eximir a las pymes y a las ONG del pago de las tasas judiciales mediante la modificación del sistema establecido por la Ley 10/2012, de 20 de noviembre.
Respecto a las pymes, criticó que "no se tiene en cuenta su capacidad económica". En su opinión, las tasas judiciales eran demasiado altas y, "más allá de la finalidad recaudatoria, parecen pretender un efecto disuasorio que colisiona frontalmente con derechos de protección constitucional".
Dos meses después, el Pleno de la Cámara Baja expresó su respaldo a la tramitación de esa proposición de ley con el apoyo del PSOE, Podemos, Compromís, ERC, Democracia y Libertad y PNV, mientras que el PP dijo que no se opondría. Sin embargo, finalmente no prosperó porque, al no formarse un nuevo gobierno tras las elecciones generales de diciembre, se disolvieron las Cortes.